La participación de venezolanos en el extranjero en las elecciones presidenciales del 2024, más allá de ser un derecho que debería estar garantizado, supone algunos retos que deben ser asumidos no solo por el Estado, sino por los organizadores de las primarias de la oposición.

Caracas. El escenario electoral actual en Venezuela presenta un tema que todavía no se ha definido: la participación de venezolanos en el extranjero. Un asunto que si bien se ha convertido en la demanda de un grupo de precandidatos presidenciales opositores, aún sigue sin resolverse por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE).

Para Francisco Castro, director de la Asociación Civil Súmate, es un tema en el que han estado haciendo evaluaciones y que destaca que podría tener dos escenarios tomando en cuenta que vaya a realizarse una elección primaria con la participación de los electores en el extranjero: un escenario con apoyo del CNE y otro sin este.

Castro indicó que la decisión sobre cualquiera de estos posibles escenarios es netamente política, y agregó que cada uno conlleva ventajas, desventajas y retos. Dijo que a su juicio la discusión de fondo debe incentivar la unidad opositora y no crear más divisiones.

En el caso de que las primarias se lleven a cabo con el voto en el extranjero habilitado y sin el apoyo técnico del CNE, Castro dijo que el principal reto sería garantizar que los posibles 4,5 millones de electores potenciales participen.

“No hay imposibles, es posible realizar un registro sin el apoyo del CNE, sin duda es una tarea compleja e importante que tendría que realizar una eventual comisión de primarias”, dijo.

Castro dijo que el principal problema de hacer este registro sin el CNE, es que esto no garantiza ni apoya la creación de una estructura para la votación de los venezolanos en el exterior de cara a las presidenciales del 2024. Añadió que la estructura actual simplemente es insuficiente.

El otro posible escenario, aquel en el que los venezolanos en el extranjero puedan participar en las primarias y estas se hagan con el apoyo del CNE, facilitaría la participación de estos en las elecciones presidenciales. Pero, al tratarse de una institución oficial del Estado, cuenta con retos propios.

Si se hace con el apoyo técnico del CNE, esas posibles inscripciones o actualizaciones de datos podrían facilitar que las personas participen en el 2024. Si no, simplemente el registro que se cree no tendría vinculación con el Registro Electoral, dijo.

El principal reto que tendría el CNE a la hora de procurar la participación de venezolanos en el extranjero se centra en la estructura de 125 representaciones diplomáticas (embajadas y consulados) en 88 países. Esto, según Castro, hace “matemáticamente imposible” que millones de venezolanos puedan inscribirse.

El director de Súmate insistió una vez más en que, en el caso de las primarias y el voto en el extranjero, la institución no favorece hacerlas con o sin el apoyo técnico del CNE, pero sí sostuvo que, independientemente de qué camino se tome, el CNE tiene la obligación constitucional y legal de iniciar los pasos para garantizar que los venezolanos fuera del país puedan votar en el 2024.

Lo que hemos sugerido es que el CNE debe emprender un diálogo nacional e internacional con fuerzas políticas y civiles para poder establecer estrategias que permitan garantizar la votación y los derechos políticos de la población fuera del país, expresó.

Hasta el momento la Plataforma Unitaria no ha notificado una fecha exacta para la realización de las primarias opositoras. Tampoco ha informado qué ocurrirá con los venezolanos en el extranjero ni si se harán con o sin el apoyo técnico del CNE.

Un derecho que debe ser garantizado

Para el politólogo y experto electoral, Jesús Castellanos, la participación de venezolanos en el extranjero supone retos importantes. Sin embargo, cree que al tratarse de un derecho político de estos ciudadanos, la oposición venezolana debe hacer todo lo posible por garantizarlo.

Castellanos expresó que existen retos como los de definir el mecanismo de participación y lograr determinar cuántos y quiénes deberían participar en las primarias desde fuera de Venezuela, pero recalcó que, de lograrse, se enviaría un mensaje importantísimo al gobierno de Nicolás Maduro y otros sectores políticos.

La participación es fundamental no solo porque es decirle al régimen que estos venezolanos son objeto de derechos políticos, algo que creo que es importante que el régimen entienda, sino porque también permitiría demostrar la intención de formar parte de un proceso democrático, dijo.

Para el experto electoral, otro posible beneficio sería el lograr la motivación de un sector importante de venezolanos que, tras su salida del país, se han hasta cierto punto desconectado de la realidad de la nación. Podría ser una forma de volver a incluirlos.

“De los venezolanos fuera del país hay una parte que se siente desmotivada, que de alguna forma no está vinculada con lo que pasa en el país por muchas razones (…) Hay quienes están haciendo su proyecto de vida, hay frustración con lo que ha pasado con el liderazgo opositor. Un proceso como este podría generar algún tipo de interés o incentivo para la población en el extranjero con respecto a lo que suceda en Venezuela”, afirmó.

Adicional al interés que pudieran generar las primarias, incluir a los que viven en el extranjero podría traducirse en un factor de unidad política en la oposición, algo de suma relevancia pues, en la opinión de Castellanos, el principal aporte o ganancia que podrían dejar las primarias “no es definir cuál sería el candidato, sino convertirse en un factor de unidad”.

Ahora bien, con una población tan grande fuera de Venezuela, posiblemente la mayor circunscripción de votantes, Castellanos reconoció que existe el riesgo de que se genere algún tipo de sesgo hacia algún candidato que a lo interno no sea tan popular. Esto sería preocupante en especial en el caso de que los venezolanos en el extranjero no puedan participar en las presidenciales del 2024, por eso él insistió en que asegurar esta participación debe ser objetivo principal de la dirigencia política.

En lo particular no creo que por un posible sesgo de la diáspora en cuanto a resultado electoral, se deba excluir el derecho de esos venezolanos a participar. Es un derecho. Una de las razones por la que deberíamos procurar que la diáspora participe en las primarias es decirle al régimen y a los venezolanos dentro del país que los que están fuera también tienen derecho a ser escuchados y marcar su posición con respecto al rumbo de la nación, sentenció.


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