A raíz de la pandemia, la Cámara de Turismo en Bolívar calcula que 70% de las agencias de viajes cerraron sus puertas. Sin embargo, con la reactivación de la actividad turística, en Canaima al menos 75% de jóvenes que trabajaban la minería, ahora lo hacen en turismo.
Ciudad Guayana. Tan solo en la primera semana siguiente a la reapertura de vuelos de Conviasa a Puerto Ordaz, el 2 de noviembre, el turismo en Bolívar se reactivó en 30%. Sin embargo, con el pasar de las semanas se redujo y se mantuvo en 20%. Esto debido a las dificultades que persisten en la entidad, incluso el hecho de que no hay vuelos directos de Puerto Ordaz a Canaima, la única zona turística que se mantuvo medianamente activa en el estado.
Para Gilbert Almarza, presidente de la Cámara de Turismo en Bolívar, ese 20% de crecimiento es significativo para un sector que venía de estar en cero desde que comenzó la pandemia de COVID-19 en marzo de 2020.
La reflexión es que con apenas la reapertura de vuelos y todas las limitaciones que todavía tenemos, como problema de combustible, cobro excesivo de los servicios básicos para el sector turismo y comercial, tuvimos un crecimiento. Si corregimos toda esa serie de fallas, podemos en poco tiempo tener un desarrollo turístico sostenible. Siendo optimista podríamos llegar entre 40% o 50% en corto plazo”, estimó Almarza.
Para el asueto decembrino, la expectativa es tener al menos 30% de ocupación en todo el estado Bolívar. Insiste, sin embargo, en la necesidad de la cooperación de las autoridades para facilitar la reactivación del sector turismo.
“Si nos acompañan las facilidades que puedan brindar las autoridades competentes de las 11 alcaldías y la Gobernación, podemos a mediano plazo hacer del estado Bolívar la potencia turística que debe ser”, afirmó.
Cerradas para no volver
Pese a que el sector turismo en Bolívar comenzó a reactivarse también desde la flexibilización que Nicolás Maduro aprobó apartir del 1 de noviembre, ello no revierte las consecuencias de más de un año desactivados.
El presidente de la Cámara de turismo en Bolívar precisa que 70% de las agencias de viaje cerraron desde que comenzó la pandemia.
Con mucho dolor digo: Cerraron para nunca volver. Muchos se fueron del país, le dieron cierre fiscales a los negocios. En el sector alojamiento, mucha de la infraestructura que había en posada se dejó de utilizar y se dedicaron a otras áreas comerciales. Podríamos hablar de un 30% de cierre. Esto repercute porque estábamos muy adelantados en el sector turismo y nos toca reconstruir muchas cosas”, agregó.
A ello se suma el cobro excesivo de servicios de Hidrobolivar y Corpoelec, que aumentaron los montos de sus facturas en 300% y 500%. Esto a pesar del bajo consumo de los servicios. Hay hoteles, por ejemplo, que usan pozos profundos. En materia de electricidad implementan planes energéticos, pero las facturas de estos servicios siguen creciendo.
Canaima a flote
Desde febrero de este año, el único destino de Bolívar con actividad turística fue Canaima, gracias a la reactivación de vuelos desde Caracas y Maracaibo.
Actualmente, hay dos vuelos semanales hacia este destino que recibe entre 80 y 90 personas cada semana, señaló Gregorio Rivas, presidente de la Asociación de Operadores Turísticos de Canaima (Asocanaima).
Si bien no se compara con años anteriores, es un flujo aceptable para las restricciones que se mantienen, principalmente los vuelos. Una de las exigencias de Asocanaima y la Cámara de Turismo en Bolívar es la reactivación de vuelos desde los aeropuertos de Ciudad Guayana, Ciudad Bolívar, así como el de Santa Elena de Uairén.
Para Almarza no solo es indispensable para el flujo turístico, sino para el transporte de alimentos que se requieren para esas zonas remotas.
“Nuestro mayor anhelo es que haya vuelos constantes de Puerto Ordaz y Ciudad Bolívar porque son el eje matriz que nos trae turistas”, agregó Rivas.
Aun así, el presidente de Asocanaima destaca el lado positivo de que se mantenga la actividad turística. Por ejemplo, indicó que entre el 70% y 75% de los jóvenes que hacían vida en la minería, hoy trabajan en el sector turismo.
Por otra parte, Canaima no escapa a problemas que ponen en riesgo sus servicios para los turistas. A pesar de los reportes a las autoridades competentes, sufren constantes averías con la microcentral eléctrica, así como con la planta de tratamiento de aguas negras que podría contaminar la laguna de Canaima.
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