La ONG Médicos Unidos de Venezuela ha sido enfática en que la mayoría de los casos de muerte del personal de salud que reportan no están dentro de las estadísticas de la administración de Nicolás Maduro, que hasta este viernes 8 de enero concentran un total de 115.332 contagiados.

Caracas. Entre el 31 de diciembre y el 6 de enero la organización Médicos Unidos de Venezuela (MUV) contabilizó siete trabajadores de la salud, entre enfermeros y médicos cirujanos, que murieron con criterios clínicos asociados a la COVID-19. La ONG acumula desde el 16 de junio de 2020 hasta este último reporte un total de 302 fallecidos de este gremio.

Cuatro de los fallecidos que registró la ONG fueron los médicos cirujanos Javier Sánchez, Eddie Ramírez, Nancy Ramos de Conde y la enfermera Ruby Hernández, del estado Zulia. Los otros tres muertos fueron el enfermero Johnson Perozo, del estado Lara; el médico José Luis Albornoz, del Distrito Capital, y el médico Edgar Rangel, de Mérida.

Médicos Unidos de Venezuela ha presentado su informe con un lapso de cinco días. Zulia se mantiene liderando la lista de decesos, con 68; seguida por Distrito Capital (28), Carabobo (26), Anzoátegui (21), Bolívar (20), Táchira (17), Aragua (15), Lara (15), Mérida (12), Falcón (10), Barinas (10), Monagas (nueve), Vargas (siete), Trujillo (siete), Nueva Esparta (siete), Guárico (siete), Portuguesa (cinco), Sucre (cuatro), Yaracuy (tres), Miranda (tres), Cojedes (tres), Apure (tres) y Delta Amacuro (dos).

La organización ha levantado esta información con aliados en las regiones, y muchas veces la confirmación tarda porque dependen de resultados de las pruebas radiodiagnósticas y de laboratorio. Además, han sido enfáticos en que la mayoría de los casos que reportan no están dentro de las estadísticas de la administración de Nicolás Maduro, que hasta este viernes 8 de enero concentraban un total de 115.332 contagiados.

En el informe que levantó la ONG durante junio-diciembre de 2020 reveló que las especialidades más afectadas con decesos por COVID-19 fueron las de gineco obstetras (24), pediatras (19), anestesiólogos (16), traumatólogos (14) y medicina crítica (13).

Igualmente, el pico más alto de muertes de personal de salud se alcanzó entre la semana del 12 al 18 de septiembre, con 28 fallecidos.

Desde la llegada de la COVID-19 al país los trabajadores de la salud han manifestado la necesidad de una correcta dotación de equipos de bioseguridad, medicinas e insumos hospitalarios para poder hacerle frente a la pandemia. A pesar de las distintas acciones de calle, asambleas y cartas emitidas durante 2020, no han recibido las respuestas que necesitan, y han tenido que recurrir a las donaciones para poder cubrir las deficiencias en los centros de salud.


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