Los conductores venezolanos se encuentran en desventaja para transportar pasajeros entre Colombia y Táchira, por lo cual se plantean llamar a una hora cero.
San Cristóbal. Un “milagro” es lo que parece que esperan los transportistas en el estado Táchira para circular hacia el departamento de Norte de Santander, en Colombia, ante la falta de aprobación de la póliza contractual y extracontractual, lo que los pone en desventaja ante los choferes del vecino país.
Y es que los conductores han pedido a las autoridades colombianas una flexibilización para que así se permita el ingreso de los carros con pasajeros, tal y como se acordó en diciembre de 2022, a través del ABC de la reapertura vehicular fronteriza.
Si bien hasta el momento hay paso para carros particulares, los inconvenientes persisten para taxis, por puestos y busetas.
Días atrás, un comunicado de la Secretaría de Tránsito en el departamento de Norte de Santander informó sobre la prohibición del paso de transporte público venezolano hacia Cúcuta.
La medida se tomó debido a que los conductores de Venezuela no han entregado la documentación para circular a través de los puentes Unión, Atanasio Girardot, Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander.
Javier Velazco, representante del gremio de taxistas en frontera, dijo que hasta la fecha las líneas constituidas legítimamente han cumplido con lo establecido, en lo que se incluye el certificado de prestación del servicio CPS y DT9. Sin embargo, a su juicio, se evidencia “un doble discurso” por parte del gobierno del vecino país al no permitir el paso.
Sostuvimos una videoconferencia con la Secretaría de Tránsito de Cúcuta y delegados del Ministerio de Transporte a fin de solicitar la flexibilización, para que así podamos trabajar y exista igualdad para ambos bandos”, expresó.
Lamentó que no hayan sido escuchados hasta los momentos, los meses pasan y la situación para ellos sigue igual: no han podido trabajar ni recuperar la inversión hecha en la documentación que tienen lista.
“Nos dijeron que fuéramos para hacer la tecnomecánica, y posteriormente trabajar, pero luego nos cerraron la puerta, ya que no nos venden las pólizas”, dijo.
Advertencia
La molestia e inconformidad aumenta con el paso de los días. Los conductores tomaron la decisión de llamar a una hora cero, como medida de protesta ante la problemática que padecen más de 36 líneas en la región.
La cifra de inversión en los vehículos para compra de cauchos, baterías, y documentos, superó los 2 millones de pesos o 500 dólares por parte de los choferes, para que estuvieran listos para ofrecer el servicio.
“Hay personas que prestaron el dinero para hacer ese gasto y ahora vemos que nos tienen cerrada la frontera. Esto muestra claramente que no hay un compromiso con la reactivación económica binacional, nos están cercenando el derecho a la igualdad de condiciones laborales”, expresó Ramiro Méndez, quien tiene más de 30 años en el eje de frontera con su vehículo de transporte de pasajeros.
Para Méndez la flexibilización va a permitir que los conductores circulen por los municipios de Villa del Rosario, Cúcuta y Los Patios.
Recordó que mientras no se abra el ingreso a transportistas desde Venezuela, los colombianos cargan pasajeros en los municipios Bolívar y Pedro María Ureña, incluso en sitios en que no deben hacerlo, sin ningún tipo de control por parte de autoridades militares y policiales de Venezuela.
Plan piloto
El vicepresidente de la Cámara de Transporte del estado Táchira y sus Frontera, Freddy Solano, apuesta por la medida, en el marco de la cantidad de peticiones realizadas ante Secretaría de Tránsito, en las que se incluye un plan piloto de un seguro venezolano que pueda cubrir daños.
“Esperamos que nos den el visto bueno, y podamos finalmente acordar una medida que nos beneficie a todos”, acotó Solano.
Los representantes esperan que a corto plazo el gobierno colombiano acuerde una medida, de lo contrario, tomarán las acciones de calle previstas.