Durante una jornada marcada por la represión de cuerpos de seguridad del Estado contra los ciudadanos, los Comités de Ayuda y Libertad se organizaron desde una sala situacional que monitoreó los hechos registrados en la protesta del pasado miércoles.

Caracas. Los Comités de Ayuda y Libertad (CAL) son una estructura reciente, creada apenas a comienzos de abril con la cual ejecutarán la Operación Libertad, esto según el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó. El diputado lo definió como el mecanismo para lograr “de forma definitiva el cese a la usurpación” de la Presidencia de la República por parte de Nicolás Maduro.

Para el cabildo del 19 de abril, el propio Guaidó aseguró que ya se habían conformado más de 3100 en toda Venezuela y para el 27 de abril los juramentó en un acto político en el que reiteró su importancia para la articulación y la comunicación de cara a la ejecución de la Operación Libertad. Estos comités tuvieron su primera prueba el pasado 1° de mayo en la que fueron la punta de lanza de la manifestación opositora y en la que se probó su capacidad para organizarse y responder a los lineamientos del Frente Amplio.

El Día del Trabajador fue la primera fecha en la que se realizó una manifestación organizada por la oposición venezolana con los CAL como principal figura organizativa y esto determinó hasta cierto punto cómo se llevó a cabo la convocatoria y cómo se desarrolló la protesta.

Contrario a otras manifestaciones, para el 1° de mayo no se dio un punto de llegada a lo que muchos asumieron iba a ser una marcha, en cambio se llamó a concentrarse en 14 puntos distintos de Caracas y, luego que las personas se reunieron, la orden de qué hacer el día sería dada a cada comité.

Los CAL cuentan con una estructura distinta a lo que han sido otras organizaciones de la oposición, como por ejemplo los frentes que componen el Frente Amplio. En los comités existe la figura de coordinador, quien es el encargado de establecer la línea de comunicación entre las bases en el ámbito parroquial y la dirigencia en el ámbito nacional. Sin embargo, la meta es que estos comités sean “lo más orgánico posible”.

“Los Comités de Ayuda y Libertad cuentan con sus coordinadores, pero están hechos como algo orgánico, no se quería que fuera algo con una estructura rígida. No se busca que existan cargos dentro del comité, sino líderes y responsables de transmitir la información que nos llega desde la dirección nacional”, explicó Jesús Vásquez, dirigente de la parroquia El Recreo y miembro del CAL de la zona.

Llegado el 1° de mayo, a los comités se les informó que debían reunirse en el punto más cercano y esperar la instrucción sobre cómo proceder. Vásquez contó que al CAL de El Recreo se le encargó trasladarse hasta la iglesia de La Chiquinquirá en La Florida.

La orden que recibimos cuando ya estábamos en La Florida fue la de no movernos de ahí, no ir a algún punto en específico, sino más bien ocupar el espacio con una protesta pacífica. La intención era la de ocupar la mayor cantidad de calles posibles, narró.

Aunque en algunos lugares, como en Ciudad Banesco en Bello Monte, algunos manifestantes se quejaron por la “falta de dirección” el 1° de mayo, Vásquez mantiene que no se trató de una falla en la comunicación, ni de una orden que no llegó, sino de la estrategia que se adoptó para esa manifestación y que fue decidida por una sala situacional que monitoreaba el desarrollo de la protesta.

“Para el 1° de mayo, como dijo el propio presidente (Juan Guaidó), tuvimos una sala situacional que estaba monitoreando todas las zonas en las que había protestas y lo que estaba sucediendo. Esa sala fue la que eventualmente tomó la decisión de mover puntos como los de Santa Mónica y la avenida Victoria a Ciudad Banesco luego que fueron reprimidos por la PNB”, señaló el dirigente.

Respuesta y seguimiento a la represión en Santa Mónica

Uno de los 14 puntos de concentración para la protesta del Día del Trabajador fue Santa Mónica, lugar en el que el accionar de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) dispersó a las personas que desde la mañana se estuvieron concentrando. Este hecho fue del conocimiento de la dirección nacional apenas ocurrió, o al menos así lo aseguró uno de los miembros del Comité de Ayuda y Libertad de San Pedro, Rubén Álvarez.

El dirigente aseguró que su línea de acción estuvo definida desde el día anterior y que era simplemente “mantenerse dentro de la parroquia”, pero la represión de la PNB evitó que este plan se llevara a cabo, no solo en Santa Mónica, sino también en la avenida Victoria, otro punto de concentración dentro de la parroquia San Pedro en el que se atacó a los manifestantes.

La represión cambió el plan que teníamos que era el de mantenernos ahí, hizo que la orden fuese la de resguardarnos y tratar de permanecer en la calle de forma pacífica solo si era seguro. Eso se lo informamos a los vecinos. Algunos se quedaron y otros se fueron a otros puntos como Bello Monte, explicó Álvarez.

Para verificar el estado de los vecinos, el dirigente principal del Frente Amplio para Distrito Capital, José Gregorio Cáribas acudió a Santa Mónica a hacer un balance de heridos y hablar con los vecinos que fueron atacados por los funcionarios.

Momento en el que efectivos de la PNB reprimían a manifestantes en Santa Mónica. Foto: Luis Morillo

El balance total fue de cinco personas heridas por perdigones y diez asfixiadas por gases lacrimógenos, todas recibieron atención en clínicas de Santa Mónica. En la avenida Victoria, Álvarez asegura que un señor perdió la vida al momento en el que huía de la policía, ya que, al momento de correr, se resbaló, cayó al suelo y se golpeó la cabeza con la acera.

La comunicación sí tuvo fallas

Aunque en la mayoría de los CAL se mantuvo en contacto directo y recibiendo las indicaciones desde el Frente Amplio, eso no se pudo lograr con todos los Comités.

Los manifestantes que salieron desde Prado de María, pertenecientes al CAL de Santa Rosalía, no recibieron una indicación directa por parte de la dirección nacional, por lo que optaron por dirigirse hasta el Centro Comercial Ciudad Tamanaco (CCCT), lugar en el que por la falta de señal telefónica no pudieron contactar al Frente Amplio.

Manifestantes en Plaza Altamira durante la protesta del 1° de mayo. Foto: Luis Morillo

“Los teléfonos no tenían señal, dentro del centro comercial no pudimos tener comunicación”, contó Luis Talavera, miembro del CAL que acompañó a los manifestantes y quien explicó que, ante la falta de una instrucción, las personas optaron por moverse hasta Altamira.

Ir hasta Altamira no fue una orden directa, fue una decisión que tomamos una vez que nos encontramos todos en el punto, dijo.

Los CAL aún son una estructura joven dentro del organigrama de la oposición venezolana y para este sábado 4 de mayo tendrán su segunda prueba de manifestación, esto en medio de un ambiente en el que el gobierno de Nicolás Maduro ha aumentado la represión en contra de los manifestantes civiles.


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