El largometraje protagonizado por Emma Stone se desarrolla en una ciudad de Londres retrofuturista.

Caracas. Pobres criaturas es una película sobre la creación y el descubrimiento. Bella Baxter (Emma Stone) es una mujer que da pasos cortos mientras registra el mundo que la rodea, aprende las palabras que describen ese mundo y se relaciona con aquellos que la cuidan.

La más reciente película de Yorgos Lanthimos es primero un deleite visual. Un mundo en blanco y negro que se llena de color cuando la protagonista va más allá de los muros que la protegen. Esos dos colores son un símbolo de su vida hasta ese momento, de la limitada visión de una realidad. Ya afuera, conoce los matices en todos los ámbitos.

Bella fue resucitada por Godwin Baxter (Willem Defoe), un científico apasionado con la creación, con sobrepasar los límites y alterar la realidad que considera convencional. 

Pobres criaturas
La película protagonizada por Emma Stone está entre las favoritas al Oscar

En su casa convive con Bella, una asistente y otras criaturas producto de sus experimentos. Animales reconstruidos con partes de distintas especies. Todo ambientado en una Londres victoriana y retrofuturista. 

Bella es la joya de su carrera. El doctor asegura que es tan solo un experimento, pero poco a poco se vislumbra el sentimiento paternal hacia la muchacha.

El guion de Pobres criaturas fue escrito por el cineasta junto con Tony McNamara, quien trabajó con el director en La favorita (2018), además de obras como la serie The Great y la película de Disney Cruella (2021).

Pobres criaturas
Hay quienes piensan que Willem Dafoe debió ser nominado al Oscar
Cine comercial, pero disruptivo

Este largometraje representa a ese cine comercial que busca ser disruptivo. Por eso subrayan muy bien las excentricidades de Godwin Baxter, su casa con ínfulas lúgubres, sus conversaciones casi cínicas sobre su infancia, a la vez que el viaje de despertar adulto y sexual de Bella es tratado con especial ímpetu. Pero más allá de eso, está el verdadero origen de su protagonista, las preguntas que el espectador pueda hacerse a partir de lo realizado por el científico. 

Porque no se trata de un mero hecho científico, sino también de las repercusiones éticas. Pocos se preguntan por la verdadera edad de la protagonista o el género de la criatura que permite que Bella viva. 

Por ese lado, Pobres criaturas es una película que mantiene la tensión en su primer acto y luego en parte del segundo. La dirección y la fotografía saben contextualizar muy bien el entorno físico y mental de la protagonista.

Sin embargo, en ese afán disruptivo, hay decisiones que no quedan muy claras, como por ejemplo el uso del ojo de pescado para algunas escenas de esta obra, nominada a 11 Oscar, entre ellos Mejor Película, Mejor Dirección y Mejor Actriz.

Pobres criaturas
La relación que surge entre Bella y el abogado acapara buena parte de Pobres criaturas
Película para muchas discusiones

Mark Ruffalo como el abogado Duncan Wedderburn está a medias en el reparto. Si bien es contundente en sus intenciones principales, lo van convirtiendo en un ser despreciable y errático. Y eso no está mal. El objetivo de su transición es entendible, pero luego luce exagerado el interés en hacerlo repugnante. 

Un personaje que es bisagra en el mundo de Bella. Es quien la anima a ir más allá de las paredes de la vieja casa.

Viajan a otras ciudades y así Bella inicia el viaje por un mundo alucinante, pero también desgarrador. La inocencia se va transformando en seguridad, como sus pasos que de ser inestables en blanco y negro son firmes cada vez más en color. 

Pobres criaturas
Al final, Pobres criaturas es el regreso de siempre al hogar

Pobres criaturas es una historia que atrapa desde el comienzo. Pero también es cierto que casi en su clímax surge un conflicto innecesario, un hecho que responde a una disyuntiva que ya había sido resuelta por la misma protagonista en su madurez, entonces se vuelve redundante, una respuesta quizá más a un ejercicio narrativo proveniente del narcisismo del autor que se lo transmite también a Bella. De hecho, ese momento hace de la película una reminiscencia de cliché de telenovela en boda.

No obstante, eso no desmorona a Pobres criaturas, una película que da para muchas discusiones. Una obra con distintas capas sobre el desarrollo de la vida desde su génesis. 


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