La dirigente estudiantil y hermana del diputado Juan Requesens, detenido sin orden judicial el martes en la noche, relató los hechos. Confirmó que nunca les explicaron las razones de la captura. Considera que a su hermano se lo llevaron porque “es una piedra de tranca para el régimen”. Su padre, el médico Juan Requesens, exigió la inmediata liberación de su hijo.

Caracas. Rafaela Requesens, la aguerrida presidenta de la icónica Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela (FCU-UCV) guarda silencio, aprieta los labios y lucha consigo misma para intentar impedir que un par de lágrimas que ya llenan sus ojos, se desborden y muestren el dolor de haber pasado a formar parte del grupo de familiares de presos políticos venezolanos.

Finalmente, admite: “Me siento triste. Estoy dolida. Juan es mi único hermano”. Se refiere a la detención del diputado Juan Requesens, por parte del Sebin, registrada el martes por la noche en Caracas.

Rafaela conversó con la prensa este jueves en el Palacio Legislativo, antes de la sesión extraordinaria de la Asamblea Nacional cuyo único punto fue un “Acuerdo en rechazo a las arbitrarias actuaciones ordenadas por Nicolás Maduro contra los diputados Juan Requesens y Julio Borges y contra la inmunidad parlamentaria”.

No duda en afirmar que el secuestro —como lo tildaron desde el primer momento los diputados de la oposición— del cual ella misma fue víctima durante tres horas, es una factura contra el joven diputado tachirense por su talante de lucha.

El régimen quiere buscar culpables ante todo lo que sucede en el país y de lo cual ellos son los responsables. A Juan le tienen miedo por que es juventud. A él y a todos los que han salido adelante. Ese mismo día de la detención él dio unas declaraciones fuertes que demuestran que va para adelante sin importar nada. Personas como él son piedra de tranca al régimen, personas como lo son todos los jóvenes de este país, que a pesar de las amenazas, golpes y amedrentamiento siguen adelante, dijo Rafaela.

Relató los momentos vividos durante la captura. Confirmó que se los llevaron en vehículos separados pero ambos fueron trasladados al Sebin de El Helicoide, donde presumen que sigue Requesens, aunque para la hora de esta nota el Estado no lo ha confirmado oficialmente. Nunca les dijeron por qué los detuvieron.

Contó que fueron más de 20 efectivos quienes se los llevaron y que ninguno daba explicaciones y algunos incluso se mostraban confundidos sobre lo que estaba ocurriendo.

Antes de despedirnos Juan me dijo, te amo, muchos besos a los bebés [sus dos hijos infantes] y mucha fuerza.

Unos minutos más tarde se le sumó el papá, el médico Juan Requesens, quien se mantuvo durante toda la declaración con su brazo sobre el hombro de su hija. En todo momento apoyó sus palabras. Negó enfáticamente que el hijo estuviera inmiscuido en los delitos que el gobierno pretende imponerle. Apoyó la lucha que ambos adelantan, cada uno desde su espacio, y los aupó a seguir adelante.

Foto y video: Maru Morales P.


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