Tres carros desvalijados y en fila india cumplieron más de dos años en las adyacencias del puente La Yerbera, en San Agustín del Norte. Los vecinos han intentado comunicarse con las autoridades para que recojan los desechos, pero no han recibido respuestas y han aparecido nuevos vehículos en otras zonas de la parroquia.

Caracas. Las calles de San Agustín del Norte se han convertido en basureros para carros desvalijados. Por más de tres años se han sumado vehículos al sector y los vecinos no han sido escuchados por las autoridades para recoger los restos y evitar esta práctica.

Potes, restos de ropa, pañales y basura es lo que se consigue en el interior de tres carros desvalijados en los alrededores del puente La Yerbera. Aunque uno de los modelos conserva la placa 7A6A8RT, los ciudadanos que hacen vida en los alrededores desconocen quién es el dueño.

José Alberto Rivas, coordinador general de los Líderes de Caracas, destacó que si esta situación se mantiene, entonces los habitantes de la zona poco a poco irán perdiendo las calles de la comunidad “hasta el punto que los vehículos abandonados lleguen a El Silencio”.

Por lo general aparecen los carros chatarra durante los fines de semana porque hay menos presencia de vecinos y no existe vigilancia policial, agregó.

Foto: Mariana Sofía García
“Una mañana simplemente apareció”

San Agustín del Norte se caracteriza por tener muchos negocios de mecánica y caucheras. Algunos vecinos consideraron que quizás este sea el motivo que ha dado pie a que dejen los carros desvalijados. Rivas insistió en que desconoce si existe alguna banda que se dedique a llevarse las piezas cuando un vehículo es abandonado.

Tomás Ramón León tiene 50 años viviendo en la Torre I de la Yerbera y destacó que esta situación ha ido empeorando poco a poco. A su juicio, los habitantes de esta residencia y los niños de una escuela cercana han sido los más afectados porque, por lo general, hay personas sin hogar que duermen dentro de los carros y hacen sus necesidades en ellos.

Hay días que el mal olor es muy fuerte. Aunque la inseguridad en San Agustín siempre ha sido alta, pienso que esto nos afecta más porque no sabemos si esas personas que hacen vida en los carros durante la noche nos puedan robar, lamentó Tomás Ramón León.

“Vino una grúa y dejó el carro acá sin decir nada”, aseguró Orián Guzmán, cauchero de un local cercano a un edificio de la Gran Misión Vivienda Venezuela / Foto: Mariana Sofía García.

Dora Dominguez, vendedora de dulces y alquiler de llamadas en San Agustín, relató que en otras oportunidades los venezolanos que viven en esa zona han logrado saber quién es el dueño del carro abandonado y a través de la presión por parte de los vecinos lograron que los retiraran. Eso sí, nunca han sido las autoridades quienes levantan el carro, siempre somos los habitantes de la zona que nos molestamos y lo conseguimos, afirmó.

El llamado por parte de la comunidad de San Agustín del Norte es que se recojan los desechos y que las autoridades eviten que este tipo de actos continúen. Igualmente, que los ciudadanos tomen conciencia para mejorar el sector.

Foto: Mariana Sofía García

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