La Audiencia Nacional española tomó la decisión pese a que el exjefe de Inteligencia venezolano estaba colaborando con la justicia ibérica con la entrega de documentos sobre el financiamiento al partido Podemos. Con Carvajal cae, en menos de dos meses, la tercera ficha con la cual estados Unidos espera develar una red de corrupción y lavado de dinero, entre otras cosas.
Caracas. La Audiencia Nacional de España aprobó, este miércoles 20 de octubre, la extradición del exjefe de Inteligencia de Venezuela, Hugo Carvajal.
La instancia jurídica española tomó la decisión en virtud de que le fue negado el beneficio del asilo en la vía administrativa y pese que al militar en condición de retiro había colaborado con la justicia española con la entrega de documentos de acuerdo con los cuales el partido español Podemos recibió recursos del gobierno de Venezuela.
Según los reportes de medios españoles, los magistrados dieron luz verde para que Carvajal, que estaba recluido en la cárcel de Estremera, quede a disposición de la Unidad de Cooperación Policial Internacional que se encargará de entregar al detenido.
Carvajal fue capturado en un apartamento en Madrid el 9 de septiembre, en el cual estuvo escondido por varios meses.
El ex jefe de Inteligencia creó la página web hugocarvajal.com para contar “sus verdades”, pero esta fue bloqueada por Cantv y otros prestadores de servicio de Internet.
Con Carvajal cae la tercera ficha fuente de información de los “secretos” del oficialismo en menos de tres meses. El pasado 16 de octubre, desde la prisión de Cabo Verde fue extraditado a Estados Unidos el empresario colombiano Álex Saab, a quien se le acusa de ser financista vinculado al gobierno de Nicolás Maduro. Además, es investigado por corrupción, entre otros negocios con el programa de alimentos Clap. También se le imputan cargos por lavado de dinero. Estuvo detenido en África desde el 12 de junio de 2020.
El mismo día que se conoció la extradición de Saab, el gobierno venezolano le dio una patada a la mesa de diálogo con la oposición que se estableció en México con Noruega, entre otros países como mediadores.
Un día antes, el 15 de octubre, la Audiencia Nacional de España autorizó la extradición de la extesorera nacional de Venezuela, Claudia Patricia Díaz Guillén a Estados Unidos. A Díaz Guillén la señalan de blanqueo de capitales y organización criminal para favorecer presuntamente a empresarios venezolanos. También, de obtener dólares preferenciales junto con su esposo, Adrián Velásquez Figueroa entre 2008 y 2017.
Los opositores venezolanos cifran esperanzas en que los extraditados den pruebas de todo el andamiaje de corrupción y de la red de delincuencia organizada en la que presuntamente están vinculados altos personeros del gobierno nacional y con ello, no solo tratar de que se haga justicia sino también lograr un cambio político en el país.