El caraqueño de apenas 22 años de edad fue incluido en el once ideal de la última doble fecha de eliminatorias, donde el lateral derecho marcó su primer tanto con la selección venezolana.
Caracas. La evolución en la cancha del defensor venezolano Jon Aramburu impresiona por su rapidez y su notable deseo de mejorar día a día, algo inusual en un futbolista de apenas 22 años de edad.
En un país donde los jugadores se desarrollan con menor rapidez que en otras naciones más “futbolizadas”, el caraqueño demuestra que con “disciplina, esfuerzo, talento y una pizca de suerte” –la fórmula que suele repetir para explicar su crecimiento acelerado en el mundo del balón– es posible cumplir las metas en el ámbito deportivo.
El vertiginoso ascenso de Aramburu en el balompié lo ha llevado a convertirse en un indiscutible en el once del argentino Fernando Batista, quien lo hizo debutar con la selección absoluta apenas hace poco más de un año, el 18 de junio de 2023 en un amistoso contra Guatemala en Connecticut, Estados Unidos.
A partir de ahí, el “Búfalo” –su apodo en la disciplina– ha ido consiguiendo objetivos con la camiseta nacional.
En el segundo año de las eliminatorias mundialistas se ganó la titularidad con el combinado. También en este 2024 disputó su primera Copa América. Además, esta semana marcó su primer gol con la Vinotinto, una diana de muy buena factura en el duelo contra Paraguay en Asunción.
Ese tanto le valió a Jon Mikel ser seleccionado en el once ideal de las clasificatorias de octubre por la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol) junto con figuras tan destacadas como el argentino Lionel Messi y el colombiano James Rodríguez, entre otros.
Del San Ignacio a la Vinotinto
Aramburu se hizo futbolista en las canchas del caraqueño Colegio San Ignacio de Loyola, una cantera del balompié criollo de donde salieron otros vinotintos como Juanpi Añor, Alain Baroja y Fernando “Colorado” Aristeguieta, por mencionar solo nombres más recientes.
Bajo la conducción del también exvinotinto Leopoldo “Polín” Páez Pumar, el defensor llamó la atención de los equipos profesionales y firmó con el Deportivo La Guaira. En 2017, Aramburu dio sus primeros pasos en las categorías menores de los varguenses y en 2020 hizo su estreno con el primer equipo.
Tras destacar en la máxima categoría nacional, el joven decidió emigrar a Europa. En 2022 estaba jugando en el Real Unión de la Tercera División española. Esto le trajo muchas críticas por irse a probar suerte en una categoría inferior.
No obstante, luego de un año, la Real Sociedad se interesó en Jon y tras destacar en el equipo filial, recibió el llamado a la Primera en 2023, lo que lo llevó a ganarse el puesto en el conjunto vasco e incluso actuar en torneos tan prestigiosos como la Champions League y la Liga Europa, un lujo para cualquier futbolista venezolano.
El fútbol europeo te exige mejorar en todos los aspectos, pero el que es bueno y hace todo por llegar lo va a conseguir, independientemente de la nacionalidad. Si tengo que trabajar el doble lo hago”, resumió su experiencia en España el capitalino en el podcast oficial del la selección.
Por su ascendencia vasca, Jon Aramburu “vive un sueño” al vestir los colores de la oncena de San Sebastián. Sin embargo, no esconde su amor por la Vinotinto, a la que, luego de su gol de esta semana, aseguró en sus redes que defenderá “hasta que el corazón deje de latir”.
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