Maestras y voluntarias se unen para mitigar la desnutrición infantil en Filas de Mariche

Mala nutrición

Erika Marchán, nutricionista, explicó que las causas de los problemas nutricionales pueden ser diversas y multifactoriales. Algunas veces están relacionadas con factores individuales, familiares o comunitarias.

Caracas. Alejandra, de cinco años, asiste diariamente a su colegio, ubicado en la parroquia Filas de Mariche, para aprender y divertirse junto con sus compañeros. Sin embargo, para finales de abril sus maestras notaron que la niña constantemente estaba cansada y algunas veces se dormía en clases. 

Yelitza* empezó a notar que Alejandra estaba muy delgada y al momento de interactuar en la clase sus respuestas eran vagas o repetidas, lo que la llevó a sospechar que la niña no estaba comiendo bien o en su hogar existía algún problema. 

Su tamaño y peso no eran acordes a su edad. Su cabello lucía quebradizo, sentía cansancio o falta de energía y en la hora de la merienda no comía, dijo la docente.

Por eso Yelitza tuvo que solicitar para la niña una revisión nutricional y la refirieron al programa de alimentación de Darmelys en Filas de Mariche, donde la diagnosticaron con desnutrición aguda. 

Mala alimentación
Alejandra en el programa de alimentación de Darmelys en Filas de Mariche.| Fotografía: Tairy Gamboa

Erika Marchán, nutricionista del Hospital de Niños J. M. de los Ríos, explicó que la mala nutrición es un problema que se detecta en niños, niñas y adolescentes cuando no reciben los nutrientes necesarios para un crecimiento y desarrollo adecuados. 

Marchán aseguró que esto puede afectar el crecimiento de un niño al punto de comprometer el desarrollo de su cerebro, lo que aumenta el riesgo de tener retraso en el lenguaje, pérdida de la atención y de las habilidades de resolución de problemas. 

De acuerdo con el informe del Estado Mundial de la Infancia 2019: Niños, alimentos y nutrición, elaborado por la Unicef, al menos uno de cada tres niños menores de cinco años está desnutrido o sufre sobrepeso. 

Agregó que cuando los niños o adolescentes tienen problemas de alimentación va a existir un deterioro de sus habilidades cognitivas en general y por ende genera un retraso en su progreso educativo

Ese retraso se ve reflejado en el rendimiento académico. Será un niño que no va a poder  memorizar las cosas tan rápido, con dificultad para concentrarse en una actividad y para el habla

Las causas 

Marchán indicó que las causas de los problemas nutricionales pueden ser diversas y multifactoriales, que algunas veces están relacionadas con factores individuales, familiares o comunitarias.

Fotografía: Tairy Gamboa

Además, mencionó que actualmente algunas familias no pueden acceder de manera adecuada a los alimentos nutritivos y tampoco tienen alimentos en casa por el bajo poder adquisitivo de los venezolanos. 

Las prácticas inadecuadas de alimentación o la falta de información sobre una sana y equilibrada nutrición son otras causas que producen problemas alimenticios, aseveró la especialista. 

Alejandra es un reflejo de esta situación, vive solo con mamá en una de las zonas populares de Filas de Mariche. Cuando hablé con su representante me dijo que algunas veces no comían porque no tenía comida, ya que ella no estaba trabajando, dijo Yelitza.

Poco consumo de alimentos 

Yelitza señaló que Alejandra no tenía una alimentación balanceada y adecuada.

De acuerdo con la Encovi 2023,  87,6 % de las familias que reciben las cajas de los Comité Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) viven en pobreza extrema.

Dichas cajas, compuestas mayormente por carbohidratos, son la principal fuente de alimentación en muchos hogares. Por esa razón, Marta Hurtado, nutricionista clínica, enfatizó que la calidad de alimentación en los niños o adolescentes es deficiente.

Los niños no se están alimentando bien. Están comiendo principalmente harinas o carbohidratos, y por ende las comidas no tienen aportes nutricionales, acotó Hurtado

Según una evaluación de Unicef, cerca del 45 % de los niños de entre seis meses y dos años de edad no reciben ninguna fruta o verdura. Cerca del 60 % no come huevos, productos lácteos, pescado o carne.  El problema no es tanto la disponibilidad de alimentos, sino la dificultad de obtenerlos.

Fotografía: Tairy Gamboa

Desde que Alejandra llegó al programa Alimenta la Solidaridad empezó a subir de peso progresivamente. Ahí le han garantizado sus tres comidas y le dan suplementos nutricionales. Alejandra actualmente salió de la crisis de desnutrición aguda, pero sigue en el programa para evitar que tenga recaídas, aseguró Yelitza.

(*Los nombres fueron modificados por medidas de protección a las fuentes).

Lea también:

Desnutrición infantil y fallas de los servicios básicos no dan tregua en Perijá, estado Zulia


Participa en la conversación