El líder comunitario y activista de los derechos humanos solicitó la visita de su cardiólogo, ante la falta de atención especializada en el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin). Tras más de un mes incomunicado recibió su primera visita.
Caracas. “No me siento bien, necesito que me vea un médico”, dijo el periodista Carlos Julio Rojas a su esposa, Francys Fernández, durante su primera visita, en El Helicoide, sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).
El periodista tiene al menos 39 días con la presión arterial desestabilizada, le varía entre 130/90 y 140/100 (120/80mmHg valor normal), contó Fernández a Crónica.Uno.
Tras más de un mes detenido e incomunicado de sus familiares, Carlos Julio recibió su primera visita el viernes, 24 de mayo, cuando se cumplían 39 días tras las rejas.
Su pareja lo notó muy ansioso y preocupado en las dos horas que le permitieron para verlo, en El Helicoide. Fue tres veces a orinar.
Desde que fue aprehendido a Carlos Julio le impiden juramentar a sus abogados de confianza y en su lugar le impusieron defensa pública, pero no se han comunicado con él ni con sus parientes.
“Le pido al Estado que sea responsable y que permita que tenga su visita de médico personal. Tiene 39 días el Sebin y los médicos de ahí no han hecho nada. Él pidió que por favor lo llevemos un cardiólogo”.
Carlos Julio fue detenido el 15 de abril en la Candelaria, mientras se encontraba con su pareja. Hombres vestidos de negro y con capuchas lo subieron a la fuerza en un vehículo sin placa. Vecinos de la parroquia trataron de impedir que se lo llevaran.
El Ministerio Público lo imputó por los presuntos delitos de asociación, terrorismo, conspiración, instigación a delinquir y magnicidio en grado de tentativa.
Tarek William Saab, fiscal general designado por la extinta Asamblea Nacional Constituyente, informó que Rojas organizó un plan llamado “hasta el final” para atacar instituciones públicas y el sistema eléctrico nacional.
Tarek William Saab: Revela el interrogado que Carlos Julio Rojas, le reveló parte del “Plan Hasta el Final” del partido Vente Venezuela, que consistía en generar acciones de violencia, sabotaje del sistema eléctrico nacional, metro de Caracas
— Ministerio Público venezolano (@MinpublicoVEN) April 16, 2024
Responsabilizan al Estado
Fernández explicó que los problemas con la presión arterial de Carlos Julio se presentaron en octubre de 2023, desde que el estudiante John Álvarez denunció que lo obligaban a grabar un video para incriminar al periodista en la participación de actos terroristas.
Por tal razón, el detenido y su familia solicitan que lo visite su cardiólogo de confianza.
“Al Estado lo responsabilizo por cualquier cosa que pueda pasar o cualquier problema de salud. El Estado es responsable de lo que le suceda. Carlos Julio está ahí porque es un político, no es porque es un delincuente, ni porque haya hecho algo malo. Está ahí por cuestiones políticas y tiene derecho a que lo vea un médico”.
La Coalición por los Derechos Humanos y la Democracia solicitó una medida cautelar a favor de Carlos Julio, ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el 18 de marzo pasado.
El periodista denuncia, desde hace años, la carencia de los servicios públicos y otras irregularidades en la parroquia Candelaria. Es coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas y acompaña la lucha social de activistas y defensores de derechos humanos.
Esta es la tercera vez que está detenido por razones políticas. En 2020 estuvo recluido con presos comunes.
La Misión Internacional Independiente de los hechos sobre Venezuela documentó que en los últimos tres años en Venezuela se produjeron detenciones arbitrarias y muchas personas que piensan distinto al Gobierno fueron víctimas de persecución, amenazas, intimidación, difamación y estigmatización.
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