Casi nueves meses han transcurrido desde que se iniciaron las obras en el lugar. 74 millones de bolívares fuertes era la inversión para varios trabajos de remodelación en la parroquia, entre ellos la plaza Rafael Urdaneta.
Caracas. En octubre de 2015, por orden del alcalde del municipio Libertador Jorge Rodríguez, comenzaron los trabajos de remodelación de la plaza Rafael Urdaneta, mejor conocida como plaza Candelaria. Se esperaba que en diciembre de ese mismo año estuviera lista para el disfrute de todos los ciudadanos. Sin embargo, han transcurrido casi nueve meses y nada que se le ve el queso a la tostada.
Entre tanto, los parroquianos y todo el que pasa por el lugar se tragan el polvo de la obra, la cual va a paso de tortuga. Y sobre la fecha de inauguración las autoridades no dicen ni pío.
En octubre de 2015, Rodríguez no informó el monto exacto de la inversión en ese espacio. No obstante, comunicó que para la recuperación, no solo de la plaza sino de otros arreglos en la parroquia, se destinarían 74 millones de bolívares.
Hoy quienes transitan por la plaza ubicada en un lateral de la avenida Urdaneta solo pueden disfrutar la mitad de todo el lugar, ya que una cerca va de un extremo a otro e impide el paso peatonal. Además ahí hay material de construcción, escombros y poca iluminación.
“Yo escuché que la iban a tener lista como para marzo, pero esta es la fecha y aún están trabajando. Quizá sea por la escasez de cemento o por otra cosa”, puntualizó Richard Viscaya, testigo de la lentitud de la obra, pues trabaja al frente de la parada de los autobuses vendiendo cigarros y café.
Según Viscaya, a quien muchas veces le ha tocado mover su puesto por el polvo y los movimientos de tierra, es bueno que la arreglen para los que residen en el sector. “El detalle es que se han tardado demasiado”, enfatizó.
En septiembre del año 2014, Jorge Rodríguez entregó la obra de restauración de la iglesia La Candelaria y la recuperación de la parte trasera de la plaza donde hay un gimnasio libre, canchas de ping-pong y un puesto de control de la Policía Nacional Bolivariana (PNB).
Cuando comenzaron los trabajos de la segunda etapa, lugar donde está la escultura ecuestre de Rafael Urdaneta, también tenían previsto los arreglos de la concha acústica y de la fachada de la jefatura para unificar ambas zonas públicas.
Uno de los obreros, que no quiso revelar su nombre, detalló que hay días en los que no tienen material suficiente para trabajar, pero igual deben cumplir su horario.
Ya colocaron todos los ladrillos que se necesitaban para el suelo. Pero aún queda mucha arena en el lugar, y las escaleras que comunican con la acera de la avenida no están terminadas, al igual que la concha acústica a la que no le han colocado ni una mano de pintura. En el mismo estado se encuentra la jefatura ubicada al frente.
Fotos: Miguel González.
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