El 2 de julio de 1961 se fundó Ciudad Guayana, la unión entre Puerto Ordaz y San Félix. Concebida como la única ciudad planificada de Venezuela y un emporio industrial, también es víctima de años de descuido gubernamental.
Ciudad Guayana. Existe un debate sobre la fecha que debería considerarse para conmemorar el aniversario de Ciudad Guayana, que este 2024 arribó a 63 años.
El cronista Américo Fernández reseña que el 2 de julio de 1961, el entonces presidente Rómulo Betancourt puso la piedra fundacional de la unificación de los pueblos del Distrito Caroní, creado el 29 de junio de ese año, en una sola ciudad con el nombre de Santo Tomé de Guayana.
“El 29 de junio de 1961 la Asamblea Legislativa, de la cual era miembro, había reformado la Ley de División Político-Territorial del estado, para crear el Distrito Municipal Caroní, estableciendo como su capital a San Félix de Guayana perteneciente al Distrito Piar, e integrado además por Puerto Ordaz, Matanzas, Castillito y Caruachi que entonces pertenecían al Distrito Heres”, recuerda Fernández.
El cronista agrega que “al siguiente día, 30 de junio, la Asamblea Legislativa decretó la creación en la mesa de Chirica de una ciudad con el nombre de Santo Tomé de Guayana y cuya acta de fundación hizo en acto solemne el entonces presidente de la República, Rómulo Betancourt, el 2 de julio de 1961”.
La ciudad que atrajo
Ciudad Guayana se concibió como esa urbe moderna, planificada e industrializada. Atrajo a venezolanos de todas partes del país, atraídos por las industrias que prometían ser la alternativa no petrolera de Venezuela.
Mi papá vino a Ciudad Guayana hace 40 años. Vino de visita y le encantó tanto esta ciudad que nunca se fue. Nos mandó a buscar a mi mamá y a mis hermanos para venirnos a vivir acá. Yo tenía seis años cuando eso. Aquí crecimos e hicimos una nueva familia. A pesar de las circunstancias, sigo creyendo en Guayana. Por eso no me he ido”, expresó Paul Goncalves, hijo de inmigrante portugués.
Con el tiempo, el sueño de trabajar en una empresa básica quedó atrás. Las industrias dejaron de producir como en aquellos años de auge. Pero no solamente fueron las empresas básicas. En las últimas dos décadas desaparecieron espacios icónicos en la ciudad. Muchos negocios que fueron parte de la economía local.
Otros espacios que formaron parte de la administración de instituciones como la Corporación Venezolana de Guayana, CVG, quedaron abandonados como el parque Loefling, el vivero de la CVG o el Club Punta Vista, también propiedad de esta institución. Incluso el Ecomuseo del Caroní.
“Es triste cómo dejaron perder esos lugares de esparcimiento, que también sirven para el estudio como el parque Loefling con toda la vegetación que hay allí, las especies de peces en las lagunas de los parques. Y más triste, no sabemos qué pasó con todos los libros, archivos, documentos, todo ese valioso material que teníamos en la biblioteca de la CVG, hoy cerrada”, expresó Tania Golindano, educadora jubilada.
Servicios públicos
Ciudad Guayana, entre dos ríos, no escapa a los problemas de servicios básicos, como la falta de agua potable por tubería y cortes de electricidad. Además, en la actualidad registra más de 70 formaciones de cárcavas, grandes socavaciones que han significado pérdidas de viviendas en algunas zonas, mientras el problema se agudiza y no hay atención por parte de los entes competentes.
Sin embargo, hay quienes siguen apostando por esta ciudad.
Yo sí creo que es posible recuperar a Guayana. Hace falta voluntad política, pero tenemos potencial para el turismo, por ejemplo, para la cultura, incluso para la industria audiovisual”, destacó José Carrero, ingeniero civil.
Y es que justamente en Guayana surgió la propuesta de Proyecto Galpón. Se trata de una oportunidad de usar galpones inutilizados de las zonas industriales de la ciudad, para que sirvan de sets de producciones audiovisuales en la región.
Para el ciudadano común, parte del regalo para Ciudad Guayana en su 63° aniversario son las mejoras en los servicios públicos y la recuperación de sus espacios públicos y empresas básicas.
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