Las loterías comunitarias han significado una posibilidad para la población que se reúne a probar suerte o a recaudar fondos a través de la organización de un evento benéfico, que permita sumar voluntades para solventar una carencia, especialmente de salud.
Cumaná. María Sotillet (cuya identidad fue cambiada para preservar su seguridad), compró tres cartones de la lotería comunitaria un día antes del sorteo, pero no se quedó hasta el final del evento. Por ello, le encargó a su amiga que completara la dinámica y ésta resultó ser la ganadora del premio mayor de la noche.
Como recompensa, Sotillet le amobló el apartamento a su amiga por el apoyo brindado.
Los testimonios de los ganadores de las loterias comuntarias no dejan de sorprender porque vienen impregnados de realismo mágico.
Las loterías comunitarias han cobrado fuerza en distintas entidades del país, y con diferentes modalidades como alternativa para sortear las dificultades económicas.
El desarrollo de sorteos en distintos municipios del estado Sucre, ha significado también un espacio para el encuentro social con familiares y amigos que tienen pocas alternativas de diversión en la entidad.
Durante la pandemia de COVID-19, muchas fueron las zonas populares del estado Sucre en la que los vecinos evadieron el decreto de distanciamiento social, para interactuar en las llamadas loterías comunitarias.
En el estado Sucre, 98 % de la población vive por debajo de la línea de pobreza de acuerdo a la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi). Por consiguiente, ante la falta de oportunidades de empleo, las opciones de esparcimiento también son limitadas.
Atractivas
Las loterías han significado una posibilidad para la población que se reúne a probar suerte o a recaudar fondos a través de la organización de un evento benéfico, que permita sumar voluntades para solventar una carencia, especialmente de salud.
Sin embargo, los encuentros que tradicionalmente se hacían entre vecinos y familiares en pequeños espacios como salas de viviendas o en las planta baja de un edificio, se han extendido a lo largo de más de cinco calles con una logística llamativa y con premios que superan los 14.000 dólares.
Hombres y mujeres se movilizan por las distintas calles del centro de la ciudad de Cumaná en una gran feria.
Durante cada quincena, se pueden observar filas de usuarios, cargados con sillas plásticas a la espera del transporte público que los lleve al lugar del sorteo.
La lotería comunitaria más conocida en la capital sucrense, se llama “La Matica” pero no es la única que opera en la entidad. El auge de este tipo de actividades sociales captó la atención ciudadana de los habitantes del sector Chacopata en la Península de Araya, quienes en 2023 se organizaron para comprarle los repuestos a la ambulancia del sector.
Sin racionalidad económica
José Luis Sánchez, economista de la Universidad de Oriente (UDO), indicó que las loterías comunitarias no tienen sentido de racionalidad económica y no contribuyen al desarrollo del país.
No tendría sentido apostar. La probabilidad de perder es tan alta que por eso los economistas vemos la loterías con escepticismo, porque representan una oportunidad de las empresas para sacar ganancia en contra de una ilusión económica”, dijo.
Sánchez explicó que las loterías comunitarias no tienen una clasificación dentro de las actividades económicas. Sin embargo, podrían cumplir un rol de beneficencia social si están reguladas y son fiscalizadas como un juego de invite y azar.
“Aunque la población vaya a jugar, no implica una actividad económica porque no tiene sentido, desde el punto de vista fiscal. Las loterías podrían ser aprovechadas para la recaudación de ingresos tributarios de la hacienda pública municipal y estadal, si sus impuestos se transforman en financiamiento para actividades productivas que sean de beneficencia social y que los recursos excedentarios vayan a financiar actividades productivas”, explicó.
Control
Debido al auge de las loterías comunitarias, en agosto de 2023 la Gobernación del estado Sucre, con respaldo del Consejo Legislativo (CLES), creó el Instituto de Beneficencia Pública “Lotería del Mar” para la fiscalización, control y administración de los juegos en sus diferentes modalidades.
La recuperación del estado de bienestar de nuestra gente pasa por planes, proyectos y programas hilados con políticas nacionales, regionales y municipales que promueven la paz”, dijo Gilberto Pinto, gobernador del estado Sucre, cuando anunció la puesta en marcha del registro para las empresas de invite y azar.
Pinto aseguró que el instituto serviría como ente complementario para impulsar la salud, la educación, el deporte, la cultura e innovación, para que los emprendedores -con proyectos validados- generen riqueza para la familia y la sociedad por falta del elemento financiero.
Sin embargo, pocos detalles se conocen en torno al funcionamiento de la Lotería del Mar. El equipo de Crónica.Uno en la entidad, trató de consultar a sus representantes sobre el funcionamiento de la institución, pero la comunicación no tuvo respuesta.
No obstante, un reporte de la Gobernación de Sucre dice que en la entidad operan al menos 190 centros de apuesta que están obligados a legalizarse y consignar los requisitos para obtener la licencia de operatividad.
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