La Vinotinto repitió el libreto de Lima en Mérida

Al igual que en la capital peruana, la selección venezolana desperdició una ventaja de dos goles ante Argentina y cedió un empate en las eliminatorias.

Caracas. Los dos únicos puntos de la Vinotinto en la eliminatoria mundialista tienen un denominador común: en ambos choques, la selección venezolana estuvo arriba en la pizarra 2-0, encajó rápidamente el descuento y en los minutos finales cedió el empate por un despiste defensivo.

El libreto del cotejo con Perú bajo la conducción técnica de Noel “Chita” Sanvicente se repitió el martes en Mérida ante una pálida y algo remendada selección argentina, que tuvo la virtud de insistir y capitalizar los previsibles descuidos en la retaguardia de la oncena que ahora dirige Rafael Dudamel.

Claro que la historia de la octava jornada del Premundial Rusia 2018 tuvo sus matices y elementos que la diferenciaron del 2-2 que Venezuela consiguió en la capital peruana. En casa, el combinado criollo no sufrió tantas ocasiones claras del rival como en Lima, tuvo menos desconcentraciones defensivas y como puntos negativos, físicamente se desgastó más por lo pesado de la cancha y sufrió las lesiones de dos hombres. ¿Algo más? En los Andes el que era catalogado como mejor jugador del plantel en la era Sanvicente ni siquiera fue valorado para estar en el banquillo de suplentes.

“Los jugadores son evaluados desde nuestro punto de vista por lo que hacen en sus clubes y por lo que alcanzan a hacer con nosotros en los dos, tres días previos al partido. Uno como seleccionador tiene que apoyarse en la característica principal y en la posición en la que juegan en sus clubes”, señaló Dudamel sobre sus elecciones en el once inicial y la decisión de no contar en la convocatoria con el mediocampista Rómulo Otero.

[irp posts=”34605″ name=”Juegos Paralímpicos arrancan este miércoles con presencia criolla”]

Lo positivo

Más allá de la frustración por replicar en su desenlace el guión de tierras incas, la presentación vinotinto tiene sus puntos rescatables, si bien el seleccionado sigue de colista y sin opciones reales de si quiera pelear por el quinto puesto que da acceso al repechaje.

En lo anímico, el equipo mostró un espíritu renovado y una mayor fortaleza para intentar saldar con decoro el resto del camino premundialista. En lo táctico se ha mejorado —con intermitencias como las de Barranquilla— el orden y la claridad para ejecutar una propuesta que prioriza la solidaridad en la marca y el contragolpe para lastimar al contrincante.

En lo individual, la Vinotinto de Dudamel enseña una evolución al elegir algunos nombres que han solidificado ciertas posiciones como son los casos de Dani Hernández en el arco y Adalberto Peñaranda en la mitad de la cancha. Además, rendimientos elevados del ciclo anterior se mantienen y se consolidan como volvieron a demostrarlo ante la Albiceleste Juanpi Añor y Josef Martínez, este último el jugador con más regularidad de todas las clasificatorias.

Foto: AP


Participa en la conversación