El presidente de Profranquicias, Carlos Durán, asegura que la mayoría de las marcas internacionales que se incorporaron al mercado provienen de Latinoamérica y Europa, aunque se concentran en los principales centros urbanos y sigue predominando la presencia de franquicias nacionales.

Mérida. Enviado Especial.  Al menos 80 % de las empresas franquiciadas que operan en Venezuela mantuvieron su número de trabajadores o aumentaron la nómina en los primeros cuatro meses de 2022, hecho que llegó de la mano con mejoras en las ventas.

Los datos corresponden a la encuesta de tendencias de la Cámara Venezolana de Franquicias (Profranquicias), que en el primer cuatrimestre del año al menos 61 % de las empresas afiliadas al gremio incrementaron sus ventas en comparación con el mismo período de 2021.

La mejora contrasta, sin embargo, con el comportamiento del comercio en general en el último año, pues según reportes del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio) en algunas regiones del país las ventas cayeron en el primer trimestre de 2022 por factores como la adaptación al impuesto a las grandes transacciones financieras (IGTF).

Profranquicias, por su parte, reporta que entre enero y mayo alrededor de 70 % de las marcas abrió al menos un establecimiento adicional, lo que coincide con el 61 % de empresas que mantuvo el mismo número de trabajadores respecto al año anterior y el 22 % que registró incremento en sus nóminas.

El presidente de Profranquicias, Carlos Durán, dijo a Crónica.Uno durante la asamblea anual de Fedecámaras en Mérida que el sector actualmente genera cerca de 40.000 empleos directos y más de 80.000 indirectos con 4500 puntos de venta en todo el país.

Agregó que en el último año se incorporaron 10 marcas internacionales al mercado, principalmente de Latinoamérica y Europa, atraídos por la incipiente recuperación económica que vive la nación. El Gobierno, firmas privadas y organismos multilaterales estiman que la economía venezolana crecerá entre 5 % y 20 % este año respecto a 2021, aunque está lejos de recuperar niveles de hace 10 años.

Además, la mejoría económica sigue sin llegar al grueso de la población y la pobreza de ingresos sigue rampante, generando más desigualdades de estratos y entre las regiones. Durán afirma que la mayoría de las franquicias están operando en los principales centros urbanos y donde detectan poder adquisitivo para sostener su actividad.

Aún así, ocho de cada 10 empresas consultadas por Profranquicias destaca que la merma de la demanda por bajo poder adquisitivo afectó sus negocios en el primer cuatrimestre del año, aunque no necesariamente registraron pérdidas o menores ingresos.

El estudio revela que 70 % de las ventas se realizaron de forma virtual y 17 % de forma presencial, cifra cónsona con el comportamiento del consumidor venezolano desde la pandemia y desde que el Gobierno permite la libre convertibilidad de divisas.

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