El Sistema de Alerta Monitoreo y Asistencia Nutricional de Cáritas Apure (Saman), detecta desnutrición aguda global (DAG), mensualmente, en 20% de los niños que evalúa en las parroquias San Fernando y El Recreo del municipio capital, así como de Biruaca, municipio homónimo.
San Fernando. De cada 200 a 250 niños menores de 5 años de edad que evalúa el proyecto Samán de Cáritas Apure, en las zonas pastorales de la Diócesis de San Fernando, entre 50 y 60, padecen desnutrición aguda global (DAG).
La presencia de niños DAG, se focaliza en las comunidades urbanas de El Recreo y San Fernando, en la capital del estado y su vecina Biruaca, capital del municipio homónimo, informó a Crónica.Uno Juan Flores, coordinador de Cáritas Bajo Apure.
Para el reporte mensual nos exigen evaluar 130 niños, sin embargo, estamos reportando entre 200 a 250 de los cuales entre 15% y 20% , están en desnutrición grave, moderada o severa. En cada reporte las cifras varían , pero no se salen de ahí”, indicó Flores.
A través del Sistema de Alerta Monitoreo y Asistencia Nutricional y Salud, mejor conocido como proyecto Saman, se realizan entre 50 y 70 evaluaciones por cada sector de los municipios Achaguas, Biruaca y San Fernando, jurisdicción de la Diócesis, las cuales se agrupan para el informe mensual, detalló.
Además el coordinador de Cáritas reveló que al contrario de las zonas urbanas, “en las comunidades rurales como Arichuna de San Fernando o el Samán de Achaguas, es raro que salgan niños con desnutrición. Hacemos centinelas en medios rurales y los niños salen bien”.
La comunidad El Arenal de San Fernando, ubicada a escasos metros del centro capitalino, es una de las más vulnerables y con mayores carencias nutricionales, con una población infantil superior a 60%.
Flores afirmó, que los viveros de Saman, dirigidos a la recuperación nutricional de los niños DAG, permanecen en esta comunidad centinela, desde que el proyecto arrancó en Apure, en 2019. También asiste a madres lactantes y gestantes de este sector.
Un equipo médico y pastoral, voluntario, que se encarga de hacer la medición antropométrica en las comunidades, detecta los casos DAG y los ingresa a los viveros, donde permanecen entre 3 y 5 semanas dependiendo de su necesidad de recuperación, añadió.
En estos viveros los niños reciben suministro de suplementos terapéuticos, atención médica pediátrica y los kit de medicamentos cuando se enferman.
“Ahora que tenemos los consultorios médicos Beato Doctor José Gregorio Hernández, que inauguramos hace 2 meses, nos ayudamos mucho más para poder atenderlos integralmente”, precisó.
El diácono coordinador dijo además, que por estos consultorios ubicados en la curia diocesana, se atendieron, gratuitamente, 585 pacientes el primer mes y 641 el segundo mes, con medicinas incluídas, cuando hay disponibilidad en la farmacia de Cáritas.
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