Desde octubre no llega agua por tuberías para vecinos del Aeropuerto de Maiquetía

Aeropuerto

En las proximidades del principal aeródromo del país, los habitantes de Barrio Aeropuerto, Los Cascabeles, Brisas del Aeropuerto y Santa Eduvigis buscan tomas ilegales del líquido para resolver el día a día. Paralelamente, afectados de las comunidades de Week End, Solidaridad Litoral y Guaracarumbo han pagado entre 10 y 15 dólares americanos (Bs 50 y 75) por el servicio privado de cada cisterna de agua.

La Guaira. Desde mediados del mes de octubre del año pasado, las comunidades ubicadas frente al Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, al oeste del Litoral Central, claman por agua.

Con esta carencia que se ha extendido hasta las primeras semanas del año nuevo 2022, se perjudica a más de 75.000 personas que tienen sus viviendas en estas barriadas de la parroquia Urimare.

En la última campaña proselitista, el hoy gobernador José Alejandro Terán y también el ahora alcalde, José Manuel Suárez, ofrecieron el fin de la problemática, que alcanza a las 11 parroquias de la región desde hace más de tres décadas.

Ya ni vivir cerca del Aeropuerto nos ayuda. Antes de la pandemia, nos llegaba más agua por las tuberías. Desde octubre hasta los Reyes Magos, estamos secos”, precisó Albeiro Sarmiento, quien cargaba un balde de agua hacia su vivienda en el barrio Santa Eduvigis.

Aeropuerto
En el Aeropuerto de Maiquetía las fallas del servicio de agua se da en promedio entre uno o dos días. Foto: Cortesía Iaim.

Esta comunidad, separada del aeródromo por la avenida La Armada y una pasarela, atrajo las miradas del país en julio de 2021 durante los Juegos Olímpicos de Tokio, por ser la cuna de Julio Rubén Mayora Pernía, medallista de plata en la disciplina de pesas.

“Pero, ya su familia fue beneficiada por el gobierno con un apartamento y desde entonces, no pasan por aquí”, dijo Osman Díaz, un joven de 21 años de edad que buscó agua para dos pimpinas en una toma ilegal, a 100 metros de la sede de Hidrocapital en la urbanización Guaracarumbo. Para ello, caminó más dos kilómetros con otros vecinos de la zona.

En medio de un recorrido de tierra, tunas y monte, el grifo se ha convertido en la única opción para acceder al líquido para muchas personas no solo de Santa Eduvigis sino también de otras barriadas como Brisas del Aeropuerto, Los Cascabeles y Las Veguitas, así como para los que habitan en conjuntos residenciales en Guaracarumbo, Week End, Las Terrazas y Solidaridad Litoral.

En verdes

Algunos de los afectados en Solidaridad Litoral han tenido que cancelar entre 10 y 15 dólares americanos (Bs 50 y 75) por un camión cisterna que les abastece la cantidad de mil litros a sus tanques de reserva.

Con ese cubo de agua no pude llenar el tanque de mi casa. Pero como esto va para peor, debemos sacrificarnos mucho más”, sostuvo Eneida Camacho, quien habita en la Torre 4 de esta urbanización, construida en el año 2004 para favorecer a los damnificados del deslave de 1999.

“En Hidrocapital son indolentes. Todos los días dicen mentiras y lo más descarado es que no tienen pena en facilitar las cosas para los camiones cisternas que luego van a cobrarte el agua en dólares”, comentó Alan Leal, vecino de la comunidad La Torre.

Ante el panorama de escasez, en los barrios Aeropuerto y Los Cascabeles han debatido con los miembros del consejo comunal (de filiación chavista) la posibilidad de pedir cisternas gratuitas a la Gobernación de La Guaira. Pero, no han logrado el objetivo.

“Es más difícil, no estamos en campaña electoral. Ya se olvidaron de los pobres”, indicó, vía WhatsApp, Emilia Perdomo.

Mientras tanto, en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía, el agua por tuberías falla, en promedio, entre uno o dos días a la semana y cuando eso ocurre, desde la empresa hídrica bombean miles de litros de reserva.

Al Aeropuerto nunca le va a faltar gravemente el agua: eso lo puedes anotar”, expresó Antonia Ponce, trabajadora de limpieza del terminal nacional y que sufre la ausencia del líquido en su casa, ubicada en la parte alta del barrio Los Cascabeles.

Servicio decadente

Crónica.Uno procuró la versión de las autoridades de Hidrocapital, pero no se obtuvo una respuesta formal.

“Yo vivo en Santa Eduvigis y no tenemos agua, pero no le digo más porque tengo que cuidar mi trabajo”, señaló en voz baja un vigilante de la tercera edad que labora en la sede de la empresa hídrica en Maiquetía.

Aun así, ha trascendido que el suministro decayó en los últimos ocho meses por la carencia de mantenimiento del sistema de bombeo en Maiquetía, Guaracarumbo y Macuto.

Ello sin olvidar que el déficit de suministro está calculado en 40% para esta entidad federal, puesto que se generan 900 litros por segundo, mientras se necesitan aproximadamente 1700 litros para que el agua arribe a la mayoría de las viviendas de los 650.000 habitantes de la región.

El servicio de agua del Litoral Central proviene de la aducción Maya-Picure, además de pequeños diques como Petaquire en Carayaca, San Antonio en Naiguatá y Migueleno en Camurí Grande. A esas captaciones, se une un aporte desde el embalse La Mariposa, en el estado Miranda.

La Guaira es la única entidad federal de Venezuela que no tiene un embalse de almacenamiento de agua para tiempos de lluvia y que luego ese caudal acumulado sirva para distribuirlo en épocas de sequía.

En 1998, Hidrocapital, bajo el mando de José María de Viana, planificó una obra de esta naturaleza en Puerto Maya (extremo oeste, límite con el estado Aragua), pero, por razones ajenas a lo técnico, el proyecto no fue ejecutado.

En la reciente campaña electoral, el gobernador Terán prometió la construcción de un sistema de captaciones hídricas que aprovechara los afluentes del Parque Nacional El Ávila. Una vez juramentado en su cargo, no ha vuelto a hablar más del asunto.


Participa en la conversación