El GPP es una ilusión que se sustenta solo con el voto del PSUV y Tupamaro

GPP

Históricamente se ha visto al Gran Polo Patriótico (GPP) como una gran coalición de partidos políticos a favor del chavismo. Sin embargo, en la reciente elección del 21-N quedó demostrado que en realidad casi todo el peso de esta “alianza” está en los hombros del PSUV y Tupamaro

Caracas. “Estamos presentando la Alianza Perfecta Unitaria con todos los nueve partidos del GPP. En el legado de Chávez, defendiendo su legado, defendiendo la soberanía nacional”. Esas fueron las palabras con las que Nicolás Maduro presentó el 14 de septiembre la lista unitaria de candidatos del chavismo para las elecciones del 21-N. Sin embargo, luego de estas elecciones, y con las cifras en la mano, se observa que el GPP solo existe de nombre.

El GPP está compuesto por nueve partidos: El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Tupamaro, Podemos, Movimiento Electoral del Pueblo (MEP), Organización Renovadora Auténtica (ORA), Alianza Para el Cambio, el Movimiento Somos Venezuela, la Unidad Popular Venezolana (UPV) y la tarjeta del fraccionado partido Patria Para Todos (PPT). Estas organizaciones siempre se han mantenido leales al gobierno de Nicolás Maduro y apoyan a sus candidatos en bloque en cada elección en la que han participado.

Hablar de una coalición de nueve partidos transmite la imagen de que éstos juegan un rol vital para conseguir resultados electorales, que si no fuera en alianza quizás estos objetivos no se lograrían. Esa es la ilusión del GPP, pues tras las elecciones del 21-N se demostró que en realidad el PSUV y Tupamaro son las únicas fuerzas reales de esa alianza.

Sumando la cantidad de votos que el PSUV sacó en las elecciones para las gobernaciones (dejando por fuera a Barinas ya que el CNE no ha dado los resultados de este estado) y para la alcaldía de Caracas, se obtiene que el partido fundado por Hugo Chávez obtuvo 3.493.849 votos, es decir 88,77% de los votos que obtuvo el GPP. Si a esa cifra se le suman los 207.544 (5,27%) del partido Tupamaro, se alcanza el 94,04% de todos los votos chavistas a escala nacional.

Los otros siete partidos del GPP: Alianza para el Cambio, Movimiento Somos Venezuela, PPT, Podemos, MEP, UPV y ORA, representan apenas el 5,96% de la votación chavista. Es tan bajo su aporte a la causa “revolucionaria” que sumando los votos para gobernaciones (exceptuando Barinas) y la alcaldía de Caracas, ninguno logra llegar a los 50 mil votos.

Específicamente en los casos de UPV y ORA, estos ni siquiera lograron llegar a los 20 mil votos. ORA fue el cuarto partido menos votado el 21-N y UPV el sexto.

El aporte de los siete partidos más débiles del GPP es tal que ORA, UPV, el MEP, Podemos y UPP quedaron por detrás de un partido independiente como la Unión Política Popular 89 (UPP89) que logró sacar 40.959 votos.

Puede que Maduro se refiera al GPP como una “alianza perfecta” ya que le permite repetir el mismo candidato en hasta nueve tarjetas electorales, pero lo cierto es que lejos de ser una coalición donde todos aportan algo, el PSUV tendría más votos si se aliara con otras organizaciones.

Hipotéticamente hablando, y mirando exclusivamente los números, el PSUV estaría mejor desechando siete organizaciones que aportaron en conjunto 234.394 votos para el GPP, y reemplazándolas por un partido como Min-Unidad, que obtuvo 293.585 votos.


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