A la fecha más de 205 venezolanos se encuentran detenidos en diversas estaciones de policía por su presunta participación en homicidios, robos, hurtos, y secuestro.
San Cristóbal. Con más de 2200 kilómetros de territorio, la frontera colombo-venezolana es conocida como la más viva de Latinoamérica. El comercio binacional y cantidad de personas que transitan por los puentes internacionales la hace atractiva para que grupos armados quieran delinquir.
En el eje fronterizo la delincuencia organizada pretende obtener recursos para su propio financiamiento. Esto ha traído como consecuencia más de un centenar de asesinatos por disputas por control de zonas, además de la migración de bandas delincuenciales.
Una de las principales es el Tren de Aragua, que se ha extendido a otros países. Funcionarios militares y policiales en el departamento de Norte de Santander, Colombia, tienen encendidas las alarmas ante los continuos hechos delictivos, que incluyen la trata de personas.
Rutas clandestinas
La directora de la Policía Metropolitana de Cúcuta, Sandra Mora, explicó que se implementaron nuevos operativos para mantener un control sobre los pasos ilegales. Las trochas son usadas para la trata de personas. Por esos lugares, cobran desde 20 y 30 dólares para poder circular.
Las trochas representan un desafío para quienes pasan por allí, por ello debemos reforzar los controles. Muchos niños pasan por esos puntos ilegales, por lo que debemos estar atentos para recibir a esos menores de edad con dignidad”, expresó.
Los caminos verdes superan los 250 según cifras de la ONG FundaRedes. Las bandas buscan reclutar ciudadanos a sus filas para delinquir o para explotación sexual.
La coronel Mora afirmó que “Los Porras”, AK47, entre otros, de forma constante aplican esta acción contra los migrantes que tratan de salir por la frontera.
De acuerdo con trabajos de inteligencia realizados por las policías, estas bandas estarían haciendo algunas alianzas para el “multicrimen”. También aseguró que podrían contactar sicarios de estados como Aragua, Carabobo, entre otros para venir a delinquir junto a ellos en frontera.
Operación Espejo
El secretario de Seguridad Ciudadana de Cúcuta, Diego Villamizar, indicó que en consejos de seguridad se acordó realizar la Operación Espejo.
Se trata de articular acciones tanto en Colombia y en Venezuela, cada fuerza de seguridad en su territorio, para frenar a estas bandas, especialmente en cuanto a la trata de personas. A su juicio, es el delito que más preocupa debido a la continua migración venezolana.
Alertó que las bandas trasnacionales son las que tiene el control en los pasos ilegales, por donde pasan mercancías de contrabando y drogas. Junto a la Fiscalía de Colombia realizan un trabajo de investigación para identificar a quiénes pertenecen estas organizaciones.
Reunión binacional
Hace pocos días, el gobernador del departamento de Norte de Santander, William Villamizar, sostuvo una reunión con el gobernador del estado Táchira, Freddy Bernal, para acordar acciones binacionales. Es así que se establecieron cuatro mesas técnicas de trabajo, basadas en la seguridad fronteriza, la economía, lo social y la asamblea departamental fronteriza.
En el área de seguridad abordarán el crimen transfronterizo, la trata de personas, la desaparición forzada de personas, entre otros. En el económico, la zona binacional fronteriza que permita la articulación para dinamizar la economía, a través del turismo y el intercambio de productos.
Al cruzar la información, un delincuente que sea buscado en los dos países puede pagar por sus delitos. En esto avanzan los dos gobiernos, gracias a la integración fronteriza”, dijo Villamizar.
También se abarcará la protección a las familias, personas vulnerables, el tránsito transfronterizo, la salud, la educación y el deporte. En la asamblea departamental fronteriza, debatirán la reactivación de la agenda de encuentros entre diputados del parlamento del Táchira y del departamento del Norte de Santander.
Rescatadas cinco adolescentes
El pasado fin de semana en el estado Táchira se llevó a cabo la segunda fase de la operación “Tango”, la cual dejó un saldo de seis personas detenidas y una orden de captura contra un grupo de personas que pretendía llevar cinco adolescentes tachirenses a Trinidad y Tobago para explotación sexual.
Las investigaciones revelaron que uno de los detenidos N. A. Lugo Díaz, de 19 años se dedicaba a captar a adolescentes entre 14 y 17 años, bajo la falsa promesa de que iban a ingresar a una academia de modelaje, de la cual obtendrían un alto ingreso económico.
Tras aceptar las jóvenes serían trasladadas desde los diversos terminales de pasajeros de la región hacia Caracas, mediante la ayuda de los hoy capturados, A. Ramírez Pimentel, de 23, años; J. Cote Corona, de 28 años; y A. Ramos Ramos.
En Caracas fue aprehendido V. Pérez Silva, de 53 años, quien era miembro de esta banda y padre de Vrangely Pérez Ñáñez 23 años, quien reside en Trinidad y Tobago. Se presume que ella iba a recibir a las adolescentes al llegar a esta nación.
Esta banda tenía ramificaciones en los estados Táchira, Carabobo, Aragua y Caracas. Las adolescentes regresaron al seno de sus familias en la región.
Participa en la conversación