817 vecinos de La Vega se beneficiaron con jornada de salud organizada por sociedad civil

jornada de salud

La actividad resultó en 817 personas atendidas y 26 médicos a la disposición de brindar asistencia en materia de salud para la comunidad de La Vega. Habitantes de distintos sectores indicaron que la necesidad básica de salud es muy importante y los voluntarios estarían dispuestos a ayudar en todo.

Caracas. Este sábado 8 de junio se realizó una jornada de salud que surgió de una iniciativa de la red eclesiástica de la parroquia San Alberto Hurtado, parte alta de La Vega, que, en conjunto con los vecinos, formaron alianzas con la Fundación Cáritas de Venezuela y la Asociación de Médicos Amigos del estado Sucre (Amisucre). También contó con donaciones de vacunas que hizo el Ministerio de Salud y con una asistencia que sobrepasó las expectativas.

La jornada llevó el nombre de José Gregorio Hernández, debido a que se dedicó al centenario de su muerte y como respuesta a la emergencia humanitaria en salud. Se llevó a cabo en las instalaciones del colegio Fe y Alegría Andy Aparicio, donde cada salón se destinó a distintas áreas médicas y especializaciones.

A las 7:00 a. m. se comenzó a brindar la atención médica gratuita. Una cola larga de personas esperaba en las afueras del centro educativo y a medida que pasaban las horas, aumentaba la demanda.

Los profesionales de la salud estimaron que atenderían entre 450 y 500 pacientes. Sin embargo, la asistencia sobrepasó las expectativas y contabilizaron a 817 personas atendidas, entre ellas 152 niños en el área de pediatría y se aplicaron 177 vacunas, aportadas por el Ministerio de Salud. También se prestó asistencia veterinaria a 95 animales.

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Foto: Cortesía

Los medicamentos, entregados por Cáritas de Venezuela, se ofrecieron de manera gratuita. El requisito era tener récipe en mano de la consulta previa realizada en cualquiera de las áreas médicas. La organización daba hasta un máximo de cinco unidades por persona. El encargado de la organización, diácono Virgilio, destacó que es la primera vez que van al sector. De todos modos brindan jornadas permanentes en Santo Cristo de La Vega.

Rafael Belmonte, profesor de la Facultad de Medicina de la UCV y presidente de Amisucre, informó que contaron con 26 médicos de distintas especialidades para la jornada. Mencionó que el objetivo es apoyar a las comunidades más vulnerables y que han llegado a 18 estados del país para atender la grave necesidad de acceder al servicio de salud.

“Somos una ONG fundada en febrero del año 1990, con cuatro médicos a la cabeza, y que ahora son parte del equipo casi 200 galenos de diferentes áreas. Hemos visitado muchos sectores de Caracas, entre ellos las parroquias Antímano, La Pastora, San Juan y La Vega. Aunque esta es una organización que surgió en el estado Sucre, nos hemos expandido por todo el país. Antes realizábamos esta actividad más seguida, pero ahora solo se puede hacer cada dos o tres meses. Los responsables de organizar la actividad son los mismos vecinos y luego se comunican con nosotros para brindarles la asistencia”, explicó Belmonte.

Mucha gente reunida por una de las necesidades básicas: la salud. Las personas entraban, se anotaban en una lista para ser atendidos en una consulta según la especialización médica y esperaban. Los profesionales de la salud tomaban la talla, el peso y la estatura en pleno pasillo de la institución. La vacunación, una de las áreas más solicitadas, recorría una fila larga. Pero eso sí, no se quedaba ni un vecino sin ser chequeado.

“Estoy aquí porque tengo problemas respiratorios y he ido a consultas en hospitales, pero la espera es muy larga. Luego cuando me mandan a comprar los medicamentos resulta que no puedo adquirirlos porque son demasiado caros. Solo uno me cuesta 60.000 bolívares y la pensión está en 40.000 bolívares”, dijo Nancy Germany, vecina de Las Casitas.

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Área de vacunación. Foto: Diana Maitta
Áreas de asistencia

En esta jornada se realizaron consultas de pediatría, en las que participaron cinco especialistas; el área de medicina interna e infectología contó con cuatro médicos; cardiología y neumonología estuvieron apoyadas por tres médicos. Los especialistas restantes atendieron en las distintas especializaciones como oftalmología, traumatología o clínica del dolor, medicina veterinaria y psicoterapia.

En su mayoría, se beneficiaron los habitantes de los sectores Los Mangos, La Pradera, Las Casitas y adyacencias al colegio Fe y Alegría Andy Aparicio.

Los medicamentos que más ofrecieron a la comunidad fueron para las vías respiratorias, para la tos, supresiones nasales, analgésicos y para la tensión arterial.

Con esta ya van cuatro jornadas realizadas por la red eclesiástica San Alberto Hurtado, en convenio con la Asociación Venezolana de Servicios de Salud de Orientación Cristiana (Avessoc) y el Centro de Salud Santa Inés.

Alfredo Infante, párroco de la iglesia San Alberto Hurtado en La Vega, dijo que el objetivo es forjar una comunidad que se organice y deje instalada bases con las organizaciones para responder a las necesidades. Acotó que de igual forma lo hacen en temas de derechos humanos, alimentación y educación.

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En los pasillos se habilitó un área para tomar medidas, talla y peso. Foto: Diana Maitta
El voluntariado activo

Esta jornada de salud no solo se hizo posible gracias a las organizaciones, sino también a los 62 voluntarios que pertenecen a diferentes comunidades de La Vega. Manifestaron al equipo de Crónica.Uno que es una labor solidaria en un momento de necesidad muy grande. Los voluntarios piensan, además, que aportar es mejor que quedarse sin hacer nada.

“Soy voluntaria porque me gusta colaborar con mi gente y lo veo como una forma de servir al prójimo. Me uní porque yo participo en un comedor social del sector, allí nos reunieron para comentarnos sobre la jornada y nos preguntaron si queríamos ser parte de esta iniciativa. Ayudo al doctor de neumonología, anoto a los pacientes, los organizo e incluso ayudo en otras áreas que hagan falta. He notado mucha participación”, contó Kimberly Jaimes, vecina del sector Las Casitas.

Había colaboradores en cada área médica. Llevaban jarras de jugo para hidratar al equipo e indicaban cualquier duda o inquietud que tuvieran los asistentes.

“Estoy aquí porque voy a misa cada domingo. Dios me ayudó con una enfermedad que tenía y ahora siento que se lo puedo compensar con esta gran labor. Estaré siempre dispuesta a servir a mi comunidad”, comentó una voluntaria del sector Los Mangos.

Más que una jornada de salud, fue un motivo para que la comunidad de La Vega se organizara y pudieran realizar alianzas con distintas organizaciones que están dispuestas a aportar su grano de arena siempre que lo necesiten.

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Voluntaria del área de neumonología. Foto: Diana Maitta

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