Representantes del gremio de transporte público indicaron que en la entidad no se respetan los acuerdos llegados con los entes gubernamentales para abastecerse de gasolina. Afirman que solo tres bombas están autorizadas para surtirlos y además deben ser postulados por sus respectivas líneas en un sistema de cupos, lo que limita su trabajo.

Barcelona. En el estado Anzoátegui, los transportistas comienzan a sentir las limitaciones del nuevo sistema de venta de combustible implementado por el ejecutivo de Nicolás Maduro desde el pasado 1° de junio.

Cuando entró en vigencia de la nueva modalidad para cargar combustible, los transportistas y los organismos gubernamentales de la entidad acordaron no establecer límites para el abastecimiento y mucho menos sometimiento al esquema de pico y placa, pero a dos semanas de implementado el sistema la realidad es otra.

Solo tres estaciones de servicio, de las más de 25 que hay en la zona norte, están habilitadas para darle “prioridad” a los autobuseros; sin embargo, desde esta semana impera un nuevo requisito: las líneas de transporte deben postular a grupos de conductores y cuando logren surtir gasolina, deberán esperar una semana para volver a llenar sus tanques.

Aquí se saltaron todos los acuerdos. Ya no funcionan las cuatro bombas para surtir sino tres (Pozuelos, Oasis y Potocos) y ahora tenemos esa nueva regla de que las líneas postulan a los conductores para que carguen gasolina y estos tienen que esperar luego una semana para poder cargar nuevamente. Esto es un total desastre”, dijo Lorenzo Rodríguez, presidente del Sindicato Único de Trabajadores de Transporte de Anzoátegui Sutta.

El viernes pasado, los transportistas sostuvieron una reunión con diputados en el Consejo Legislativo de Anzoátegui para tratar de expandir a ocho la cantidad de estaciones de servicio disponibles; no obstante, se conoció que en la reunión no se establecieron ningún tipo de acuerdos.

Propuestas de aumento

Rodríguez advierte que, lo más probable, es que cuando termine el llamado “período de gracia” de tres meses dado al transporte para cargar gasolina subsidiada (sin pago alguno), la tendrán que cancelar ellos en dólares. Entonces se deberá discutir un posible aumento en el precio del pasaje, para el cual ya tienen varias propuestas.

El pasaje “oficial” en el área urbana anzoatiguense está fijado en Bs 5.000, pese a ello actualmente los conductores cobran entre 15.000 y 20.000 bolívares, las principales razones que argumentan para el incremento son: en primera instancia, las maromas que tienen que hacer para poder llenar el tanque; en segundo lugar, que para no perder tiempo deben pagar el combustible “bachaqueado” en dólares y, en tercera instancia, el aumento en el precio de los productos de la canasta básica.

De acuerdo con un estudio de costos realizado por el SUTTA, de establecerse el pago de la gasolina a 0,50 centavos de dólar en todas las estaciones del país, el pasaje en buses de 33 puestos se cobraría a 0,30 centavos de dólar al cambio fijado por el Banco Central de Venezuela (BCV), en minibus se fijaría en 0,40 dólares y en carritos de cinco puestos en 0,80 dólares.

Otra alternativa prevé fijar el pasaje en 0,14 dólares en buses de 33 puestos, 0,17 dólares en minibus de 32 y 0,31 dólares en vehículos de cinco pasajeros. Esto, claro está, si se llegase a establecer el cobro en dólares, pero con una especie de subsidio permanente.

En ambas propuestas el precio estaría por debajo del pago que un ciudadano promedio hace en Estados Unidos, en donde según la página web preciosmundi.com, un billete de autobús se cotiza en 2,51 dólares con el precio del litro de combustible a 0,71 centavos de dólar.

Pedro Jiménez maneja una camioneta que cubre la ruta Barcelona-Puerto La Cruz y afirma que la prioridad para el transporte público no existe, es más el tiempo que pierden en colas por la gasolina que el que invierten trabajando.

Para comenzar las bombas no abren en el horario fijado, sino después de las 10:00 a. m., entonces tenemos más de 100 carros por delante. Aunque hay bombas destinadas al transporte, en estas también se surten particulares, súmale que ya la gente después de las 2:00 p. m. no está en la calle, perdemos tiempo en colas y cuando salimos ya no hay pasajeros. Somos trabajadores del día a día, ¿qué vamos a llevar a la casa en esta situación?, se preguntó.

En la acera de enfrente, los pasajeros se quejan ante la poca disponibilidad de unidades para trasladarse a sus destinos. Tal fue el caso de Juan Gutiérrez que al momento de ser consultado por el equipo de Crónica.Uno indicó que ya tenía más de una hora esperando autobús.

No había una línea que tuviese más autobuses que la que va hacia los tronconales y ahora pasan de vez en cuando. El lunes no hubo carros, porque imagino que todos se fueron a las gasolineras. El martes empezaron a funcionar varios que tenían tiempo parados, pero se llenan en las primeras seis paradas porque es demasiada gente”, dijo.

Rodríguez instó al gremio a unirse en pro de que todos los transportistas de Anzoátegui puedan trabajar en mejores condiciones que las actuales.


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