Rosario de deudas golpea bolsillo de los trabajadores del Hospital Clínico Universitario de Caracas

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De 4000 trabajadores que tiene este centro hospitalario, deben estar activos 3500 y entre ellos hay quienes tienen sueldos suspendidos por procesos administrativos abiertos, sostienen delegados sindicales del Hospital Clínico Universitario de Caracas.

Caracas.  Herramientas básicas como amperímetros, testes, probadores de corrientes, guantes, destornilladores, alicates, pinzas o lámparas de repuesto son insumos que –por ejemplo– los trabajadores del Departamento de Electricidad del Hospital Clínico Universitario de Caracas (HCUC) no tienen a la mano.

Ahorita estamos haciendo las reparaciones con las herramientas propias y cuando nos pagan alguito extra compramos esas pinzas que venden en las calles a un dólar. Estamos aquí para mantener la operatividad del hospital, pero si ocurre una emergencia mayor, como un cortocircuito en algún piso, llamamos a Corpoelec, reveló uno de los obreros.

Pero no solo hay carencias de equipos materiales, también la deficiencia se observa en el número de trabajadores.

De 4000 trabajadores que tiene este centro hospitalario deben estar activos 3500 y entre ellos hay quienes tienen sueldos suspendidos por procesos administrativos abiertos, denunció Ramón Guzmán, secretario de reclamos de HCUC.

Hay tres turnos de trabajo las 24 horas del día y, por ejemplo, en las noches hay una sola enfermera atendiendo una sala de hospitalización, al igual que un solo técnico de Registros Médicos. Aquí el contrato colectivo dice que el que está en las noches debe descansar cuatro horas, pero eso no se cumple, destacó.

Rosario de deudas

Se está violando la dotación de uniformes y zapatos, reprochó uno de los obreros en un protesta el pasado jueves, 16 de junio, a las puertas del centro asistencial, que funciona dentro del campus de la Universidad Central de Venezuela (UCV).

La queja es común en todas las áreas, la escribieron en papeles que pegaron en muros y paredes. Este beneficio se lo deben a chavistas y a opositores por igual, esta es una lucha de todos, es gremial y no tiene tintes políticos, repetía el trabajador.

Guzmán aclaró que el pago por los uniformes y zapatos se hace dos veces al año, de acuerdo con los estatutos de la convención colectiva.

El gobierno no quiere a la gente protestando, pero tampoco habla de hacer un convenio de pago. En cambio, empieza la amenazadera, la descalificación, la persecución. A mí me dicen que yo no parezco de izquierda, pero tampoco me puedo apasionar, porque el bolsillo no tiene color, expresó Guzmán.

Un primer aporte de cinco salarios mínimos debió hacerse en mayo pasado y el segundo, por la misma cantidad, en junio.

A parte de eso, hay cuestiones más grandes que trascienden en el tiempo y que tocan el futuro de los agremiados. Ese es el caso del pago trimestral de las prestaciones sociales que no lo están haciendo desde 2021, cuando Patria asumió el control de las nóminas.

No nos están poniendo en el fideicomiso los días que dice la ley de acuerdo con la cantidad de años acumulados por cada trabajador. Es una deuda impagable, si no cumplen con los uniformes, menos con ese derecho. Todo el salario se nos depreció, explicó Guzmán.

Uniformes, zapatos y fideicomisos no son las únicas cuentas en este rosario de penas. El beneficio por el Día del Padre quedó estipulado en una sola cifra, según los anuncios de la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre).

Ese monto es de 12,5 bolívares y deberían cancelarlo en el último recibo de junio.

A nosotros nos hacían el evento del Día del Padre. Los sindicatos tenían en sus cláusulas hacer una fiesta a los padres, y así todas las celebraciones, para las madres, enfermeras, camareras. Pero ellos consideraron que ese era el valor y eso es una burla, criticó el sindicalista.

Más deudas

Otro beneficio, la prima por hijo, que cuando ganaban 7 bolívares era de 1,8, ahora la pusieron en 12,5, cuando el sueldo mínimo es 130.000 bolívares. Los trabajadores calculan que ese aporte que hace el patrono debería estar en 45 bolívares.

Denis Guédez, representante sindical de Hospitales y Clínicas del HCUC, añadió más irregularidades desde que cobran por la plataforma Patria. El sindicalista señaló que todos los conceptos como bonos nocturnos, horas extras, feriados, las primas, ahora las pagan al final del mes.

El 15 depositan la quincena sencilla y todo lo demás lo van pagando aparte, incluso el bono vacacional.

Entonces, una quincena de un trabajador en horario nocturno que ganaba entre 260 y 280 bolívares, ahora queda en 105 bolívares.

Mientras, el salario de una persona en el turno diurno debe estar alrededor de 300 bolívares mensuales, metiendo todos los conceptos.

Eso descontrola todo. Pagan la quincena, luego sale el bono nocturno, después el vacacional, un día tememos el dinero para la harina, el otro para la mantequilla. Es como un plan para que el trabajador se desmoralice y termine yéndose, acotó Guédez.


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