La explosión de un transformador, que había sido reparado tres años atrás gracias a los aportes de la propia comunidad, dejó sin luz cinco manzanas de la urbanización, ubicada en Turmero. Muchas de las familias han abandonado sus viviendas.
Maracay. Durante la noche del 31 de julio y la madrugada del 1° de agosto, un transformador explotó en la urbanización Valle Fresco, ubicada en Turmero del municipio Mariño del estado Aragua. Afectó cinco manzanas en las que residen unas 68 familias.
Desde entonces, permanecen sin el servicio de energía eléctrica y sin una respuesta inmediata de la corporación eléctrica en la región.
“Totalmente inhumano lo que ocurre a 68 familias que residimos en las manzanas 22 a la 28 de la urbanización Valle Fresco de Turmero. Ya son siete días consecutivos, pese a que la situación es del conocimiento de Corpoelec y la alcaldía de Mariño y ninguna solución”, repiten varios afectados desde sus cuentas en Twitter.
Algunos de los afectados, quienes piden la reserva de sus nombres, explican que la falta de electricidad en la urbanización ha obligado a muchas familias a abandonar sus viviendas y mudarse temporalmente a casas de familiares o amigos, ante la imposibilidad de cubrir sus necesidades básicas.
Y es que la falla eléctrica devino en otros problemas para los residentes de esas cinco manzanas.
“Esta situación ha conllevado que no tengamos agua, servicio que además ya es deficiente desde hace ocho años aproximadamente. Por eso, nos vemos obligados a cancelar camiones cisternas en dólares, pues hay sectores en los que no llegan las cisternas chinas que recientemente adquirió el gobierno”, dijo uno de los vecinos.
Sin embargo, las familias que con esfuerzo han podido adquirir agua en cisternas y que poseen tanques subterráneos no pueden utilizar los hidroneumáticos para bombearla. Los alimentos guardados en las neveras ya se han descompuesto, porque la mayoría no cuenta con recursos para comprar diariamente hielo.
“Si antes ya era difícil preparar los alimentos por la falta de gas, imagínense ahora que ya ni las cocinas eléctricas podemos usar”, contó una afectada.
Hace tres años, los habitantes de la urbanización atravesaron una situación similar. Corpoelec Aragua, a decir de los residentes de Valle Fresco, solo aplicaba paliativos. Eran los propios vecinos quienes sufragaban las reparaciones y hasta la comida para los técnicos de la corporación.
A principios de año, lograron adquirir un nuevo transformador, cuyo costo se dividió entre los vecinos y la alcaldía del municipio Santiago Mariño. Pero en esta oportunidad los habitantes de Valle Fresco no cuentan con el dinero que supone la adquisición de un nuevo transformador, y que, de acuerdo con la propia alcaldesa de Mariño, Joana Sánchez, estaría por el orden de los Bs. 1.060.000.000 o unos $4000.
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