La joven base del cuadro caraqueño se siente “muy preparada” para llevarse el título del certamen que arrancó este fin de semana y reúne a diez quintetos, divididos en dos conferencias.

Caracas. Lismary García es una de las jugadoras que disputa la segunda edición de la Superliga Femenina de baloncesto.

El torneo arrancó este 9 de septiembre y García, quien juega con Caribeñas, tuvo el privilegio de enfrentarse a su hermana Nayeli, ficha de Capitalinas de Distrito Capital, en el choque inaugural celebrado en el gimnasio Papá Carrillo de Sebucán.

García asegura que, a la hora de jugar, sus padres las apoyan a las dos porque, además de que los cuatro viven bajo el mismo techo, “las dos hermanas están en equipos diferentes, pero con el mismo corazón”, como dice su madre.

Diez equipos y dos conferencias

Este año, la Superliga Femenina tiene 10 equipos divididos en dos conferencias. En la Central están Caribeñas, Capitalinas, Danzantes de Miranda, Bucaneras de La Guaira y Cayenas de Carabobo y en la Centroccidental figuran Patriotas de Barinas, Pastoras de Lara, Zulianas BBC, Mineras de Cojedes y Taurinas de Girardot.

Las 10 escuadras jugarán 16 partidos en la ronda regular y los cuatro mejores quintetos de cada zona avanzarán a los cuartos de final. Luego de la primera ronda, el formato es de series directas a un máximo de tres (cuartos) y cinco encuentros (semifinales y final) y el torneo podría extenderse hasta el 1° de diciembre.

García también jugó con Caribeñas en 2021, pero este año sus expectativas son más elevadas. “Las expectativas son muy grandes y obviamente vamos por ese campeonato. La preparación que tuvimos fue muy completa desde lo físico hasta lo mental y me siento muy bien preparada para llevarnos esa copa”, asegura.

La joven piloto de apenas 20 años de edad recuerda que su padre fue clave en la decisión de elegir el baloncesto como disciplina deportiva. “Desde muy pequeña siempre me llamaron la atención los deportes. Cerca de mi casa hay una cancha y mi papá me invitó a ver sus partidos. Desde ese momento me decidí a practicar baloncesto”.

Hacen falta más oportunidades

García ya lleva 13 años en el llamado Deporte de los Gigantes, si bien los inicios, según expresa, no fueron nada alentadores. “Fue una etapa muy difícil porque en los eventos importantes de mi categoría casi nunca nos ofrecían los recursos necesarios para competir. Considero que desde hace poco es que se nos ha tomado un poco más en cuenta”.

Sobre el desarrollo del básquet femenino en Venezuela, García apunta que “más que apoyo hace falta que a las mujeres se les den mayores oportunidades para poder satisfacer a nuestro país y a la fanaticada del baloncesto”.

Para finalizar, la deportista caraqueña de la parroquia El Valle reveló que sus metas son llegar a la selección femenina de mayores y obtener una beca en el extranjero. “Eso me permitiría estudiar y seguir creciendo en mi disciplina que es el baloncesto”, concluyó.

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