La Cámara de Industrias de Alimentos señaló que 67% de las marcas que se venden en las redes públicas son de empresas privadas.
Mayela Armas/@mayearmas
Caracas. El Gobierno tiene ocho años controlando la distribución de los alimentos básicos, pero las autoridades insisten en extender el dominio. Para las empresas una mayor intervención del Estado sería “catastrófica” y aumentaría la escasez de artículos.
Manuel Larrázabal, presidente de Cavidea (Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos), señaló que “si el Ejecutivo quiere concentrar la distribución, generará más colas y no resolverá el problema del bachaqueo, lo agravará”.
El presidente Nicolás Maduro culpa a los privados de los males de la economía y considera que la escasez de bienes es por la distribución que realizan las empresas por lo cual estima que el control debe aumentar. Y el decreto de emergencia económica le da facultades para actuar, debido a que señala que el Gobierno podrá “requerir de las personas naturales o jurídicas, propietarias o poseedoras, los medios de transporte, canales de distribución, centros de acopio, beneficiadoras, mataderos, bienes y demás establecimientos para garantizar el abastecimiento oportuno de alimentos”.
Desde 2008 el Gobierno regula la distribución de alimentos a través de varias instancias y de las guías SICA, que es la plataforma donde productores, distribuidores, importadores y comerciantes deben inscribirse diariamente para informar la movilización de los alimentos y de las materias primas. Por lo tanto, el Estado está al tanto de cuánto y cómo se produce; hacia dónde se distribuyen los productos y quiénes los reciben.
Aunado a ese control, se suman las restricciones que se imponen al consumidor final de ventas por terminal de cédula y captahuellas.
Por tal motivo, Larrázabal indicó que “la industria no puede mover un kilo de materia prima y productos terminados sin autorización del Gobierno” y destacó que 67% de las marcas que se ofrecen en las redes públicas (Mercal, Pdval y Abastos Bicentenario) son de empresas privadas.
El presidente de Cavidea aseveró que “la principal causa de la escasez no es la distribución es la menor producción y el control de precios” y en ese contexto, destacó que la red privada tiene 113.000 puntos, mientras que la pública cuenta con 7.200. “Si se estatiza o se interviene la distribución, habrá más colas”.
Puso como ejemplo que en Caracas hay 1.333 puntos de ventas, con lo cual hay un punto por cada 1.458 habitantes. Si se concentra la distribución en las redes públicas habrá un punto de venta por 388.000 habitantes.
Las intervenciones, reiteró, no solucionan el bachaqueo y detalló que 67% de las compras de los revendedores son en supermercados, hipermercados, Bicentenarios, Mercal y Pdval.
Larrázabal dijo que la industria de alimentos trabaja intermitentemente y añadió que en varias empresas hay niveles críticos de inventarios.
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