El Centro Comercial Propatria, que prácticamente se mantuvo desolado durante el apagón y después de la restitución de la energía eléctrica, la mañana de este jueves estuvo concurrido por la gran cantidad de usuarios que se acercó a las agencias bancarias a retirar efectivo.

Caracas. Este jueves 28 de marzo el Centro Comercial Propatria, en la Av. Simón Bolívar, parroquia Sucre, amaneció rodeado de usuarios que se apuraban por ingresar para hacer las colas en las entidades bancarias en búsqueda de efectivo.

Noraima Marín, vecina de El Limón, fue una de las que llegó temprano al centro comercial para ir a varios bancos y hacer trámites antes de las 2 de la tarde. “Yo necesito guardar efectivo para los pasajes, siempre vengo al mercado, a la venta de helados. Hoy se ve movimiento”.

Las colas evidenciaban que la gente estaba al tanto del comunicado que publicó en su cuenta de Twitter la Superintendencia de Bancos y otras Instituciones financieras sobre la jornada especial de este jueves 28 y viernes 29 de marzo en horario comprendido entre 9:00 a. m. y 2:00 p. m.

En el Mercantil estaban dando 3000,00 a usuarios. Foto: Norma Rivas

Visitantes del centro comercial dijeron que lo que le da vida a ese sitio son los bancos que allí funcionan. De hecho, algunos comentaron que no se acercaron al recinto mientras la banca permaneció cerrada. En el Banesco los cajeros se usaban solo para consulta.

También genera mucho tráfico de usuarios la oficina del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime), que está cerrada y abrirá el lunes 1 de abril. Algunas personas se acercaron y perdieron el viaje. En la cuenta Twitter se informó que se reasignarán las citas correspondientes a los días afectados por los apagones del lunes 25 y miércoles 27 de marzo.

El comercio paulatinamente está reanudando operaciones. El pasado miércoles abrieron los laboratorios clínicos, panadería, mercado Día a Día, mueblería y Locatel.

Se observaron  negocios cerrados, pasillos oscuros, algunos comerciantes presumen que sus vecinos quieren estar seguros de la estabilidad en la electricidad. En los pisos 4 y 5 hay locales vacíos. Los visitantes apuntaron que, pese a los equipos de seguridad, el lugar es frecuentado por varios menores de edad que cometen asaltos.

Foto: Norma Rivas

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