El discurso de Manuel Galindo no sentó bien entre los diputados, porque en lugar de hablar de la corrupción lo hizo de historia, y elogió a los fallecidos Hugo Chávez y Rafael Caldera.
Juan Francisco Alonso
Caracas. El Libertador Simón Bolívar, el fallecido Hugo Chávez y el también desaparecido expresidente Rafael Caldera, a quien dijo admirar por ser “el mejor tratadista y el padre del derecho laboral venezolano”; e incluso la Ley de Amnistía. Estos fueron algunos de los personajes y temas que el contralor general de la República, Manuel Galindo, mencionó durante el discurso que hoy ofreció a la Asamblea Nacional al presentar su informe de gestión.
Sin embargo, sonados casos de corrupción como el del general (r) Víctor Cruz Weffer, de nuevo en la palestra gracias a la filtración de los Panamá Papers; ni las cuentas que funcionarios y exfuncionarios mantienen en bancos en Andorra y Suiza ni los más de 20 mil millones de dólares para importaciones que se habrían sido desviados formaron parte del reporte de Galindo a los diputados.
“Si los actos de corrupción no prescriben tampoco pueden ser objeto de una amnistía”, afirmó el responsable de velar por el buen uso de los fondos públicos, quien agregó: “Los actos de corrupción compañero atentan contra los Derechos Humanos porque cercenan el derecho prácticamente a la vida, por eso tenemos que perseguir la corrupción y se cuenta con ustedes”.
“Se pretende establecer un autoperdón que consideramos improcedente desde el punto de vista legal y moral”, agregó el funcionario, mientras era pitado y abucheado por algunos legisladores.
A lo largo de su discurso Galindo fue conminado por algunos diputados opositores a referirse al tema de la corrupción, lo cual hizo someramente.
El Contralor solamente informó que en 2015 su despacho impuso 375 inhabilitaciones para el ejercicio de funciones públicas, lo cual se traduce en un incremento de 781% en comparación con el número impuesto en 2014.
El funcionario aseguró a los diputados que la Contraloría impuso a funcionarios y particulares 482 multas por un monto de más de 22 millones de bolívares, lo que representa un aumento de 132%; y 107 reparos por un monto de 44 millones de bolívar, cifra que es 150% superior a respecto a 2014 en el número de sancionados.
Los anteriores contralores fueron el fallecido Clodosbaldo Russián y Adelina González, quienes en sus discursos al Parlamento expusieron situaciones como la de los alimentos importados por la estatal Procesadora y Distribuidora Venezolana de Alimentos (Pdval) que se pudrieron en los puertos o el de las compras excesivas de medicamentos a Cuba.
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