El artista plástico venezolano murió en Francia a sus 95 años de edad por causas naturales. La familia pidió privacidad y respeto en este momento. Cruz-Diez aportó al mundo una nueva comprensión sobre el fenómeno cromático y la independencia del color. Sus obras viven en los espacios públicos.

Caracas. Los colores, el cinetismo y el cromatismo perdieron a su mayor exponente en el mundo, el venezolano Carlos Cruz-Diez. El artista falleció este 27 de julio en Francia a sus 95 años de edad por causas naturales, informaron a través de un comunicado familiares del maestro. El 17 de agosto sería su cumpleaños.

Tu amor, tu alegría, tus enseñanzas y tus colores nos acompañarán por siempre, escribieron sus familiares en el sitio web del maestro.

Cruz-Diez logró aportar una nueva comprensión del fenómeno cromático, convirtió sus investigaciones en una de las más importantes del arte cinético.

Demostró que el color, en interacción con el observador, se convierte en una realidad autónoma que existe sin ayuda de la forma o necesidad de un soporte, se lee en el comunicado.

En sus más de 70 años de carrera artística realizó investigaciones sobre la autonomía del color e hizo más de 100 integraciones al arte en el espacio público. En el Museum of Modern Art en Nueva York, Tate Modern en Londres, Centre Pompidou en París, sus obras forman parte de la colección permanente.

En Caracas esos años de trayectoria se pueden recorrer en avenidas, suelos, paredes y museos. La obra Cromointerferencia de color aditivo (1978) se instaló en el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar, esta se convirtió en un símbolo para los migrantes venezolanos, quienes antes de abordar el avión, se llevan un pedacito de color en fotografías.

Pisar y cruzar la avenida Bolívar es la antesala a un baño de color. El Museo de la Estampa y el Diseño Carlos Cruz-Diez ya tiene 22 años exponiendo las principales creaciones del maestro, como la Cámara de Cromosaturación, Cruz-Diez la donó en 2014.

En el Centro de Acción Social por la Música de la Fundación Simón Bolívar, no solo hay instrumentos sonando en los pasillos y salas, también están los colores del artista Cruz-Diez. El suelo es un río cromático compuesto de verde, ocre azul y negro, además cuenta con 880 butacas están revestidas con su diseño cinético.

Cruz-Diez recibió numerosos premios y condecoraciones durante su carrera artística: Legión de Honor; la más importante condecoración que otorga el Gobierno de Francia, premio al Mejor Artista Vivo de la feria Estampa en España, el doctorado Honoris Causa de la Universidad Simón Bolívar y la Universidad de Los Andes, entre otros.

Los actos fúnebres se realizarán en privado, a petición de la familia. Las actividades y homenajes serán anunciadas en redes sociales.

Foto: Atelier Cruz-Diez Paris


Participa en la conversación