Hoy se cumple un año del accidente de Caño de los Becerros en el que murieron nueve personas y otras 36 quedaron heridas luego de que explotaran 161 cilindros de gas de la empresa Gasmaca. Cuando ocurrió el hecho la compañía pública era dirigida por Luisana Betancor, una joven que fue designada en la presidencia a los 28 años de edad, después de un intento fallido de ser Miss Bolívar

La exreina de belleza que estuvo al mando del gas en Monagas

Hoy se cumple un año del accidente de Caño de los Becerros en el que murieron nueve personas y otras 36 quedaron heridas luego de que explotaran 161 cilindros de gas de la empresa Gasmaca. Cuando ocurrió el hecho la compañía pública era dirigida por Luisana Betancor, una joven que fue designada en la presidencia a los 28 años de edad, después de un intento fallido de ser Miss Bolívar

“Buenas noches y bienvenidos sean todos. Tengo 24 años y soy ingeniera civil”, dice frente al micrófono una joven en un salón del hotel Laja Real de Ciudad Bolívar. Cuando es su turno de desfilar por la pasarela, las luces de los flashes impactan en la pedrería que adorna su vestido. Ella sonríe envuelta en destellos. Posa y se reúne en la tarima con el resto de las concursantes que aspiran a convertirse en Miss Bolívar. Su nombre es Luisana Betancor y es una de las miles de jóvenes que ha deseado no solo ese título, sino otro que le resulta más envidiable en un país de reinas de belleza: el de Miss Venezuela.

En esa ocasión no logró siquiera el primer paso que se había propuesto, pero al cabo de tres años, en los que cultivó una imagen asociada a la vida fitness en sus redes sociales, reapareció bajo otros reflectores: los del servicio público. A los 28 años de edad fue nombrada, el 14 de febrero de 2019, presidenta de Gases de Maturín C.A (Gasmaca), empresa pública encargada de la distribución del gas doméstico del estado Monagas. La designación la hizo la exgobernadora y actual ministra de Educación, Yelitze Santaella, dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) de Nicolás Maduro y una declarada aliada política de Diosdado Cabello, el número dos del chavismo, quien es monaguense y considera su estado natal un bastión político.

Betancor se mantuvo durante dos años y siete meses al frente de la empresa estratégica, de cuyo suministro dependen comunidades pobres y rurales para cocinar en Monagas, entidad en cuyo subsuelo existe una de las mayores reservas de petróleo y gas asociado del país. Su gestión quedó marcada por un hecho luctuoso: un accidente en el cual murieron nueve personas y otras 36 resultaron heridas en la comunidad de Caño de los Becerros, en el municipio Piar, tras la explosión de 161 bombonas de gas en una jornada comunal de distribución. Del suceso ocurrido el 28 de diciembre de 2020, se cumple un año.

Después del hecho, la joven congeló su presencia en redes sociales y en septiembre pasado se separó del cargo. Desde entonces ha mantenido un muy bajo perfil público, que no rompió cuando Crónica.Uno intentó contactarla para esta nota a través de llamadas, mensajes de WhatsApp y mensajes privados en su cuenta de Instagram desde el 9 de diciembre pasado.

El salto después de una aspiración frustrada

Antes del intento de representar al estado Bolívar, Betancor ya había concursado en certámenes de belleza locales y fue elegida reina de Carnavales de Monagas, estado donde nació el 3 de mayo de 1990. La joven también compartía en redes su participación en carreras como la Caracas Rock y era miembro de la comunidad Monagas Fit.  

Con cinco meses en el cargo de presidenta de la empresa pública Gasmaca, Betancor promocionaba su emprendimiento de ropa deportiva en la que tenía de socia a su gemela. “Quiero darle gracias a Dios por el cumplimiento de este gran sueño: el lanzamiento de nuestra marca L&L Fitness será el 26, 27 y 28 de julio en el Centro Comercial Monagas Plaza, salón Casa Blanca en el marco de la segunda edición de Gastronomía 2019”, dijo en un video de instagram publicado el 23 de julio de ese año. En esa cuenta se publicaron imágenes de ambas modelando los conjuntos de su colección Twins Fitness junto con atletas y entrenadores. En ese contexto las hermanas anunciaron la publicación de un libro con consejos sobre nutrición

Las redes sociales también le permitieron a Betancor compartir la petición de mano que le hizo el empresario y deportista Hekmet Wassouf, con una puesta en escena digna de la farándula en diciembre de 2020. El entonces novio detuvo el tránsito de la avenida Raúl Leoni, una de las principales arterias viales de Maturín. En el video sobre el compromiso, que la pareja hizo viral, se ve llegar a cada uno por separado en camionetas marca Ford modelo Explorer y otra Toyota 4Runner. El empresario muestra en la parte superior de su vehículo un arreglo elaborado con globos rojos y dorados que dice “Cásate conmigo”. Corre hasta la joven y ambos se abrazan. Betancor acepta la propuesta al mostrar otro arreglo realizado con globos con la palabra “Sí”. Ambos sonríen y se besan.

La boda se realizó en la catedral de Nuestra Señora del Carmen, ubicada en Maturín. La recepción fue en las instalaciones del hotel Tibisay Boutique, conocido como el antiguo Venetur. Los novios vistieron creaciones del diseñador Edgar Alfaro, que él mismo publicó en su cuenta de Instagram. El modisto es reconocido por elaborar los trajes de misses como Isabella Rodríguez (Miss Venezuela 2018), Sthefany Gutierrez (Miss Venezuela 2017) y Migbelys Castellanos (Miss Venezuela 2013).

Wassouf es dueño de Café de Oriente, una marca dedicada a la producción, comercialización y venta de distintas variedades de café desde hace cuatro años aproximadamente. El negocio cuenta con distribuidores y puntos de venta en los sectores Punta de Mata, Maturín y Aguasay.

La vinculación de Betancor con la farándula, el espectáculo y el arte está en la sangre familiar. La madre de la expresidenta de Gasmaca es Milagros Simosa, quien fue directora del Instituto de Cultura en Monagas (ICUM), una dependencia de la Gobernación de Monagas. Simosa ha cultivado una carrera como cantante de ritmos tropicales. En un video que está disponible en YouTube, por ejemplo, se le ve años atrás compartiendo tarima con el reconocido cantante de salsa Oscar D’ León. 

También ha organizado concursos como “Nace una estrella”, con cinco temporadas, para impulsar el talento monaguense. Cuando era directora del ICUM realizó otros torneos como  “La Voz Institucional 2019”, promovida por la Gobernación de Monagas e instituciones como: Seniat, Gasmaca, Protección Civil, Planificación, Dirección Regional de Salud, Guardia del Pueblo y el Servím. Recientemente —a propósito de la pandemia de la COVID-19 —, organizó la iniciativa “Monagas canta en cuarentena”.

La madre de Betancor ha sabido combinar sus facetas como cantante y funcionaria pública. Incluso llegó a amenizar con sus canciones el programa Cantando con Yelitze los jueves de 7:00 a. m. a 10:00 a. m. en el cual la entonces gobernadora Santaella se dirigía a los monaguenses. Simosa, quien fue presidenta del ICUM entre 2017 y 2021, pertenecía al gabinete de la mandataria cuando su hija llegó a Gasmaca. Fueron dos miembros de la misma familia ligados a la gobernación monaguense.

Una gestión empañada

Betancor estudió en el Instituto Universitario Politécnico Santiago Mariño, institución privada, en la cual se graduó de ingeniería civil, área que se especializa en el diseño, construcción y mantenimiento de infraestructura. Se recibió después de un destacado bachillerato en el Liceo Nacional Francisco Isnardi en el que egresó con promedio de 19,4 según datos de la Oficina de Planificación del Sector Universitario (Opsu). El único antecedente en el servicio público identificado por este equipo la vincula como trabajadora del Ministerio de Vivienda y el Hábitat desde 2015, año en el que Manuel Quevedo se desempeñaba como ministro. Según consulta realizada el pasado 6 de diciembre, aún figuraba como activa en la institución.

Cuando asumió la presidencia de Gasmaca se dispuso a darle continuidad al plan de entrega de gas a domicilio que puso en marcha su antecesora, María Gabriela Bastardo, con el objetivo de eliminar la venta y las colas en la Planta Distribuidora, localizada en la zona industrial de Maturín. Ya en 2017 la empresa se había fusionado con Pdvsa Gas Comunal para fijar rutas de distribución y garantizar el expendio del gas en las comunidades, según declaró la entonces gobernadora, Yelitze Santaella. Para junio de 2018, pasó a formar parte del conglomerado de empresas estratégicas y productivas de la Corporación para el Desarrollo del estado Monagas (Corpo Monagas). 

Sin embargo, para octubre de 2020 los reclamos de la población que exigían celeridad en el suministro del gas doméstico y en la distribución de bombonas aumentaron. Reportes de la prensa local reseñaban para esa fecha hasta 10 protestas diarias en sectores como El Abanico, Los Guaritos, Complejo Paramaconi, Las Cocuizas, calle Carvajal y callejón Universidad, todos del municipio Maturín. Con cada manifestación, la gobernación respondía con promesas de mejorar el servicio y anuncios de entregas de bombonas. 

Habitantes del sector Caño de los Becerros, en el municipio Piar de Maturín, cumplían más de 10 meses sin gas cuando el 28 de diciembre de 2020 se organizó una jornada de distribución a cargo de la presidenta del consejo comunal. Ese día 161 bombonas de gas que habían descargado y almacenado en una casa explotaron y dejaron 36 heridos con quemaduras de segundo y tercer grado y nueve fallecidos, entre ellos cuatro niños de entre 5 y 13 años de edad. 

A 17 días de la tragedia, Betancor informó, a través de su participación en el programa Conversando con Yelitze, que el accidente había sido originado por una colilla de cigarrillo, según el diagnóstico de expertos de Gasmaca. 

Las víctimas de Caño de los Becerros no solo pidieron la destitución de la directiva de Gasmaca, sino que también hicieron solicitudes al defensor del Pueblo para que intercediera en la agilización de las investigaciones y garantizar asistencia por parte del Estado, incluyendo una indemnización por los daños causados. Sin embargo, no obtuvieron respuestas. Solo el diputado opositor Guillermo Vásquez pidió un derecho de palabra en el Consejo Legislativo del estado Monagas para solicitar la comparecencia de Luisana Betancor. En respuesta a la petición se creó una comisión mixta para esclarecer las causas que generaron el accidente, presidida por el legislador Reinaldo Astudillo. 

Durante la gestión de Betancor hubo otros tres accidentes vinculados a cilindros con gas. El 13 de enero de 2021, a 16 días de la explosión en Caño de los Becerros, hubo otro accidente en la comunidad Juana Ramírez de Costo Abajo donde dos adultos y un niño resultaron heridos con quemaduras de segundo y tercer grado en más de 60 % de sus cuerpos. Cinco días después, el 18 de enero, una mujer sufrió lesiones leves tras una llamarada de fuego que se produjo por la fuga de gas en una bombona que instaló en su casa en el sector Cachipo. Al día siguiente, el 19 de enero, explotó un cilindro de gas en el sector Halliburton de la parroquia Jusepín de Maturín. En ese accidente resultó herido Antonio Olivo, quien fue trasladado hasta el Hospital Central de Maturín, al presentar contusiones en la cabeza y extremidades. 

Desde finales de 2020, cuando ocurrió la tragedia de los Caños, no existen nuevas publicaciones que den cuenta de sus actividades cotidianas. En sus redes no hay rastros recientes de su vida pública ni de su afición por el fitness y el entretenimiento. La joven empresaria, antes constantemente activa con sus usuarios, tiene su perfil social tan estancado como el curso de las averiguaciones abiertas durante su gestión.

Quemados

Textos: Celina Carquez, María Victoria Fermín, Betania Franquis, Omarela Depablos, Leomara Cárdenas, Gregoria Díaz, Yelitza Figueroa y Natacha Sánchez.

Investigación: Shaylim Valderrama, Betania Franquis, Omarela Depablos y María Victoria Fermín (Caracas), Gregoria Díaz (Aragua), Natacha Sánchez (Monagas), Yelitza Figueroa (Lara), Leomara Cárdenas (Carabobo), José Camacho (Anzoátegui), Sulay García (Apure), Jhoalys Siverio (Bolívar), Mónica Salazar (Sucre), Ana Fabiola Barrera (Táchira), Rafael Lastra (Vargas) y Mariela Nava (Zulia).

Edición de textos: Jesús Barreto.

Diseño e infografías: Juan Carlos Hernández.

Fotos y videos: Gleybert Asensio, Leomara Cárdenas, Gregoria Díaz, Yelitza Figueroa, Enzo Manzanares y Natacha Sánchez.

Coordinación editorial: María Victoria Fermín.

Dirección general: Celina Carquez.

Consultor editorial: David González.

Publicado el 16 de diciembre de 2021