La Iglesia católica venezolana hace gestiones para lograr la beatificación de monseñor Montes de Oca
Valencia. Este sábado 12 de agosto de 2023 se llevó a cabo la inhumación de los restos de monseñor Salvador Montes de Oca a partir de las 9:00 a. m. Tuvo como punto de partida la iglesia de las Siervas del Santísimo.
Montes de Oca, quien ostenta el título de siervo de Dios, se encontraba enterrado desde el 15 de junio de 1947 en la Catedral de Valencia, luego de que sus restos fueran enviados a Venezuela desde Italia, donde fue asesinado por las tropas nazis.
Sin embargo, la trayectoria de Montes de Oca ha sido remarcable, no solo por su defensa de los derechos humanos en tiempos en los que estos estaban en entredicho, razón suficiente para ganarle el destierro durante la dictadura de Juan Vicente Gómez y en el futuro la antipatía del régimen fascista de Mussolini y de Hitler.
El proceso
Desde hace muchos años, la Fundación Salvador Montes de Oca ha perseguido la meta de la canonización del que fuese no solo el segundo obispo de Valencia, sino también el más joven en llegar al cargo.
El pasado 22 de mayo iniciaron el proceso de excavación para extraer los restos del siervo de Dios con la finalidad de verificar la autenticidad de los restos, los cuales fueron analizados y ratificados por el equipo forense. Los trabajos estuvieron supervisados por la funeraria Vallés. Luego de cumplirse los requisitos civiles y religiosos se procedió a la extracción de los restos.
Estos reposaban exactamente detrás del presbiterio, a escasos metros del altar mayor. Ahí el equipo de forenses liderado por el presidente de la Academia de Medicina, Enrique López Loyo, llevó a cabo el proceso pieza por pieza, en vista de que el féretro se encontraba en muy mal estado.
El equipo estuvo conformado por las peritos Carmen Garcés y Ana Nóbrega, las antropólogas María Inés Chacón y Lourdes Pérez y la odontólogo forense Sonia Viso.
Una vez extraídos los restos, estos fueron llevados a la iglesia de las Siervas del Santísimo, en la avenida Navas Espínola, a ocho calles de la Catedral (750 metros). En ese el lugar se llevaron a cabo los procesos analíticos, pues el monseñor tuvo una hermana que perteneció a este templo religioso.
La osteobiografía
María Inés Chacón explicó que se le realizó una osteobiografía a los restos. De inmediato individualizaron las piezas, a las que se les hizo una purificación. Luego, reconstruyeron el esqueleto.
Aunque buena parte del cuerpo de Montes de Oca se conservó, el cráneo que llegó de Italia intacto actualmente se encuentra partido en varios fragmentos. De igual modo, otras partes de la osamenta se han desintegrado. Sin embargo, la doctora Viso reveló que en uno de los dientes hallados descubrieron una fractura perimortem; es decir, que ocurrió durante la muerte del obispo.
Salvador Montes de Oca fue fusilado en la ciudad de Lucca (Italia) el 6 de septiembre de 1944.
Un acto solemne
Una vez concluidos los análisis y los preparativos, se llevó a cabo la ceremonia eclesiástica, a cargo del arzobispo de Caracas, cardenal Baltazar Porras, quien estuvo acompañado por otros miembros de la alta jerarquía católica venezolana. Entre ellos el cardenal Diego Padrón; el administrador apostólico de la Arquidiócesis de Valencia, monseñor Saúl Figueroa; el vicario general, monseñor José Jiménez, y el obispo de Carora, monseñor Carlos Enrique Curiel, entre otros.
A la ceremonia asistieron familiares del monseñor, entre quienes estaban dos sobrinos de edad ya avanzada. También estuvieron presentes el alcalde de Valencia, Julio Fuenmayor, y la rectora de la Universidad de Carabobo, Jessy Divo.
Una vez concluido el acto, los restos de Montes de Oca fueron llevados a la capilla de la Virgen de Coromoto, justo en el ala derecha de la Catedral. Ahora se encuentran en un nuevo féretro hecho por familiares y con algunas de las piezas rescatadas de su viejo ataúd.
En su interior, las piezas óseas están contenidas en una caja de material transparente, envuelta con un listón cruzado de color púrpura.
Un paso para la Iglesia venezolana
En declaraciones a Crónica.Uno, el cardenal Porras afirmó que este suceso es muy importante para la historia de la Iglesia católica venezolana.
El proceso se da como parte del esfuerzo de la Arquidiócesis de Valencia, que persigue la canonización del siervo de Dios. Porras explicó que para generar mayor venerabilidad se necesitaba de un sitio de fácil acceso para rezar y encomendarse a Montes de Oca: “Donde estaba no era un lugar de fácil acceso”.
Además, Porras indicó que dicho espacio se escogió porque durante su tiempo en Valencia Montes de Oca evangelizó con la Virgen de Coromoto. “En ese momento no era aún la patrona de Venezuela, pero ya había una conexión”.
Para el cardenal Porras, no quedan dudas sobre la santidad del monseñor, pero insiste en que son los venezolanos los que tienen el poder de hacerlo santo.
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