Julio Fuenmayor es el nuevo alcalde oficialista de Valencia, llegó con 43.965 votos menos de los que pudo acumular el exalcalde chavista Alejandro Marvez en 2017. Cesar Heredia, dirigente social de la parroquia Miguel Peña, aseguró que la abstención en esa zona popular fue de 62%.
Valencia-. En las elecciones municipales y regionales celebradas el 21 de noviembre, los protagonistas fueron la abstención y amenazas de perder la bolsa Clap. En el municipio Valencia, capital de Carabobo, ganó Julio Fuenmayor (Gran Polo Patriótico), que era director de operaciones de la alcaldía y fue quien sustituyó en las primarias del PSUV a Alejandro Marvez.
Fuenmayor, el nuevo alcalde de Valencia, llegó con 43.965 votos menos de los que pudo acumular Marvez en 2017.
El candidato de la Alianza Democrática, Rubén Limas, obtuvo el segundo lugar con 37.116 votos, mientras que Carlos Lozano se ubicó en el tercer puesto.
Julio Fuenmayor es un alcalde poco mediático. No gozaba de mayor reconocimiento, sino del que le podía dar el gobernador reelecto, Rafael Lacava. En las comunidades del sur de la capital, donde se aglomera la mayor población vulnerable, poco sabían de sus propuestas políticas en materia de educación, economía, salud, transporte y servicios públicos.
Maribel (nombre ficticio para resguardar la identidad), reside en barrio Los Girasoles, parroquia Miguel Peña, trabaja como aseadora de casas, recordó que un mes antes de las elecciones, llegó a su comunidad la bolsa del Clap después de cuatro meses de ausencia. Al momento de recibirlo, los responsables de entregar los alimentos, le indicaron que debía votar por Julio Fuenmayor, porque si no perdería el “beneficio”, que es pago y tasado en tres dólares.
Yo no fui a votar. El domingo me fueron a buscar, me insistieron, pero yo no salí, cuando se descuidaron, les dije que sí había ido. Dije esa mentira porque amenazan a uno que no le van a dar la bolsa del Clap”, dijo la mujer que es madre soltera de tres niñas.
José Contreras, reside en Lomas de Funval, sur de la capital carabobeña, no ejerció su derecho al voto porque considera que el resultado de las elecciones ya estaba “predestinado”.
Contreras agregó: “Para qué iba a votar si ya sabía qué iba a pasar. No creo en las elecciones. No creo en los políticos, todos dicen mentira. Yo hubiese votado por la oposición. Pero no me gustaba ni Lozano ni Limas”.
Erika Benaventa si sufragó en la escuela básica Monseñor Luis Eduardo Enríquez, ubicada en la parroquia Miguel Peña. Asegura que su voto fue por la oposición, no quiso revelar el nombre de la opción que eligió. Afirmó que en el centro electoral que está inscrita, hubo algunas irregularidades, entre ellas, que no aparecían personas en las listas de mesas electorales, citó como ejemplo el de su hermana.
“Nosotras nos fuimos temprano, no había cola, ni nada. Yo me busqué y aparecí. No me tardé mucho. Pero mi hermana no apareció. Ella y yo votamos juntas siempre en esa escuela, este año no apareció. Nadie le daba respuesta por qué no aparecía. Nos vinimos y ella no pudo votar”, relató Erika Benaventa.
César Heredia, dirigente social de la parroquia Miguel Peña, aseguró que la abstención en esa zona fue de 62%. “El chavismo todavía tiene el control de un porcentaje de la población del sur de Valencia. Tiene solo 25% de aceptación y solo les bastó movilizarlos para poder ganar”.
Carabobo sigue con “DracuGobierno”
En el estado Carabobo estaban convocados a sufragar 1.667.484 electores, sólo 36,6% salió a ejercer su derecho al voto. El gobernador reelecto de Carabobo, Rafael Lacava, obtuvo 323.176 votos, en cuatro años restó 138.824 voluntades, ya que en 2017 llegó al capitolio carabobeño con 460.602 votos.
La MUD en cuatro años perdió 272.198 votos. En 2017, el excandidato a la gobernación de Carabobo, Alejandro Feo La Cruz, obtuvo 420.874 sufragios. En 2021, el abanderado de la MUD, Enzo Scarano, apenas logró obtener 148.679.
Enzo Scarano, el contrincante más cercano de Rafael Lacava, dijo en un vídeo difundido en redes sociales luego de conocerse los resultados electorales que: “Lamentablemente nos ganó la abstención. Yo, particularmente, asumo mi responsabilidad porque fui el candidato y tengo que asumir que posiblemente no logré motivar a la gente para que entendiera que lo que buscamos nosotros es que se respete las familias, los valores. Que nos encontremos todos nuevamente como venezolanos, que se acabe la persecución, que los servicios públicos funcionen y que nuestras escuelas estén bien atendidas”.
Lacava, en su discurso de reelección, aseguró que va a invertir dinero para potenciar y reactivar el Oncológico Miguel Pérez Carreño. No habló sobre la crisis de servicios públicos, tampoco de la educación; solo manifestó que espera que en este nuevo periodo pueda contar con más recursos económicos para poder trabajar por Carabobo.
“Esperemos que haya más recursos para que se facilite la acción de gobierno y esperemos también que los políticos que nos llevaron a esta situación de sanciones y de bloqueo, rectifiquen y desistan de esa tesis porque eso lo que le está haciendo es un gran daño al pueblo venezolano, no a los chavistas, ni a los que gobernamos, le está haciendo un gran daño a todos y cada uno de los venezolanos, tanto de oposición como de gobierno”, dijo Lacava en un boletín de prensa.
Juan Tortolero, secretario general de Sintraenseñanza Carabobo, manifestó que todas las problemáticas que denunciaron en cuatro años de gestión de Rafael Lacava, siguen existiendo en la actualidad. Lamentó que durante el primer discurso de reelección de Lacava, no haya hablado del sector educativo.
“En el caso educativo, las infraestructuras de las escuelas continúan sin atención. La educación en Carabobo no es pública, porque los padres deben poner de sus bolsillos para el mantenimiento de las escuelas, eso es una falta de respeto para con los representantes. Las escuelas son unos ranchos”, dijo Tortolero.
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