En seis meses se fabricaron 42.500 unidades y esas soluciones terminadas representan apenas 11 % de la meta de este año, que son 400.000 viviendas
Caracas. En abril, el presidente Nicolás Maduro aseguró que en el país se “construye una casa cada tres minutos y a un ritmo de 20 cada hora” para así cumplir con la meta de 400.000 soluciones habitacionales en 2015, pero los datos oficiales evidencian que la producción de la Misión Vivienda no va a paso de vencedores.
La información del Ministerio de la Vivienda y de los entes oficiales revela que en el primer semestre del año se culminaron 42.570 casas, 14 % menos que en el mismo período de 2014, cuando se hicieron 49.804.
Esa disminución en la producción obedece a la falta de insumos. Ya en 2014, el Ministerio de la Vivienda en su Memoria y Cuenta tuvo que admitir que “la escasez de materiales ocasionó retrasos considerables en la ejecución de las obras”, y en este 2015 ese escollo sigue sin superarse, porque las empresas estatales que producen los materiales para construir continúan con problemas operativos.
Misión en rojo
Producción menor a 2012. La construcción de casas en el primer semestre del año estuvo 48 % por debajo del mismo lapso de 2012 cuando se produjeron 82.000 viviendas. Los datos evidencian que desde hace tres años el plan habitacional comenzó a perder impulso.
Meta cuesta arriba. Para este período se contempla la producción de 400.000 casas, pero hasta junio se había cumplido con 11 % de la meta.
Desde que se lanzó la Misión Vivienda solamente en el 2012 se alcanzó el objetivo. Ese año se contemplaron 200.000 viviendas y ese fue el número de unidades culminadas. En 2013 se anunció la construcción de 350.000 casas y se realizaron 201.000. En 2014 el Gobierno dijo que se efectuarían 400.000 unidades y se terminaron 126.000.
Menos materiales. Tras el lanzamiento de la Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV) el Gobierno estableció prioridades en la distribución de los insumos con lo cual el grueso de los materiales generado por las empresas estatales era para el plan oficial, pero en cuatro años los problemas operativos de las industrias se agudizaron y ahora el programa habitacional padece la falta de insumos. Actualmente, la construcción tiene fallas de suministro de cemento, cabilllas y agregados (piedra y arena).
La producción de cemento, que controla en 90 % el Estado, enfrenta limitaciones. Fuentes del sector construcción señalan que la Fábrica Nacional de Cementos continúa con dificultades en los hornos y de las tres plantas que tiene Venezolana de Cementos, sola una está abasteciendo al mercado. La que opera a plena capacidad es la Industria Venezolana de Cementos.
El Estado también tiene el dominio en la fabricación de acero y en el semestre la producción de cabillas retrocedió. Sidor apenas generó 75.000 toneladas de cabillas, mucho menos de lo que hacían antes de la nacionalización.
Inversión. En enero, el Jefe de Estado dijo que la inversión para la Misión sería de 226 millardos de bolívares, monto que triplica al autorizado en 2014 que fue por 70 millardos de bolívares. La inyección de fondos de este año se desagrega en: 42,9 millardos de bolívares mediante un crédito adicional, 60 millardos de bolívares por el encaje legal —depósitos que hacen los bancos en el BCV— 102 millardos de bolívares de la cartera hipotecaria y 3 millardos de dólares del Fonden y el Fondo Chino. Pese a que se contempla más plata, la construcción de casas es baja.
Foto: AVN
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