El 16 de noviembre pasado parte del centro comercial Propatria se quedó sin servicio eléctrico luego de un cortocircuito. 210 comercios quedaron afectados y una semana después Corpoelec les dio respuesta.
Caracas. Sonia Brito administra una pizzería y un restaurante, que elabora cachapas y otros platillos, en el Centro Comercial Propatria. Y por una falla eléctrica durante ocho días perdió casi 100 % de su mercancía en alimentos.
Logró almacenar un poco del material en los locales que sí tenían electricidad y preservar lo que recibieron desde el día que se quedaron sin luz. En total 210 comercios resultaron afectados.
El miércoles, 16 de noviembre, la torre B del centro comercial Propatria se quedó sin servicio eléctrico luego de un cortocircuito. Los comerciantes alegaron que el evento fue producido por un trabajador de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) que hacia labores en el sitio.
Los afectados manifestaron que durante la semana que permanecieron sin electricidad y en reiteradas ocasiones denunciaron la situación ante Corpoelec. Una semana después fue que respondieron su solicitud. Sin embargo, tienen miedo de que se vuelva a producir alguna falla y les perjudique aún más.
El incidente dejó a dos personas heridas: al operador de Corpoelec –del cual se desconoce su estado de salud– y a un trabajador del centro comercial, quien tuvo quemaduras leves en brazos y en el rostro.
De acuerdo con declaraciones de los afectados, el servicio eléctrico fue restituido en horas de la madrugada del miércoles, 23 de noviembre. No obstante, los bancos El Tesoro, Mercantil, Bicentenario y una peluquería infantil seguían sin el servicio hasta la tarde del miércoles.
Angustias y pérdidas en producción
Desde que se fue la luz Sonia no ha tenido el valor de pedir cálculos sobre la pérdida monetaria que tuvo en ambos comercios. Le provoca llorar.
Otro local que tuvo pérdidas totales en materia prima fue la heladería EFE. Al día siguiente del hecho ya todo el material estaba dañado.
“Mi jefe me dice que me asegure de que no nos vayan a quitar la luz para no volver a tener pérdida. Pero eso es lo que no sé”, dijo Leidis Jiménez, empleada de la heladería.
Adieren Aira es dueña de una peluquería y aseguró que solo en una semana tuvo una pérdida de entre $300 y $400. Además tiene que pagar un alquiler mensual de $160 y el sueldo de sus empleadas. Actualmente hay tres manicuristas en su negocio y se vieron obligadas a trabajar a domicilio.
“Yo tengo una serie de responsabilidades que cumplir y ando con la cabeza hinchada de tanto pensar”, expresó.
Elizabeth Cejías labora en una peluquería infantil. El día del incidente en el centro comercial quedó muy aturdida y tuvo que sacar rápidamente a los clientes que atendía ese día. Su mayor angustia es no percibir ingresos; es el único sustento de su hogar lo que le permite pagar la universidad de su hija.
Deudas y pago de utilidades
Sonia confesó que le preocupa haber tenido inactiva su única fuente de ingreso. Ahora los locales donde labora quedaron en deuda con los proveedores y le angustia que no puedan pagarle a los empleados, sobre todo las utilidades.
“A los proveedores no les interesa que estemos sin luz. El Seniat y el Sumar tampoco le interesan lo que nos pase. Y ahorita nos corresponde pagar un impuesto millonario. Nosotros para poder pagar primero tenemos que reunir todo ese dinero”, dijo.
Pedro Fitzallen, dueño de otro comercio, informó que por toda la pérdida económica que se produjo en una semana, sus empleados tendrán un retraso en el pago de las utilidades, el cual les correspondía la semana anterior. “Vamos a programarlo para finales de la semana que viene y eso es pérdida para todos”.
En octubre, varias zonas residenciales permanecieron hasta una semana sin luz eléctrica. Vecinos de Los Caobos, en Plaza Venezuela y Los Dos Caminos, denunciaron las fallas de los transformadores en los edificios Dan y la Residencia Yutaje.
De acuerdo con algunas declaraciones, la sustitución de un transformador podría costar más de 10.000 dólares.
En el mes de octubre de 2022 se registraron 18.609 apagones en todo el país, según el registro del Observatorio Gasto Público de Cedice.
El estado Aragua y Táchira se ubican como los más afectados debido a las fuertes lluvias y al mal estado de los servicios públicos.
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