María Elisa Domínguez, presidenta de la Fundación para la Protección y Defensa del Patrimonio Cultural de Caracas, ente adscrito a la Alcaldía del Municipio Libertador, aseguró que la empresa privada Restaura tiene la concesión de los paraguas.
Caracas. El pasaje Linares luce diferente. Esto tiene que ver con que desde principios de junio no están los paraguas rojos que solían adornar esta calle empedrada y de estilo colonial, que está al lado de la casa natal de Simón Bolívar y que forma parte del casco histórico del centro de Caracas.
Ahora por el pasaje Linares, que conecta la avenida Universidad con la plaza El Venezolano, no transita la misma cantidad de gente. Desde 2019, cuando instalaron los primeros paraguas de diversos colores, no faltaba quien se detuviera a tomarse una foto bajo su sombra. Ya nada de eso está.
Una realidad es que, antes de que los quitaran, ya los paraguas lucían decolorados, en mal estado y algunos guindaban casi a punto de caer al suelo. Sin embargo, este lugar era visitado por las organizaciones ciudadanas que recorren el centro de Caracas con turistas, tanto locales, como extranjeros.
Estos paraguas entraban en el estilo Umbrella Sky Project, una decoración urbana que adorna varias ciudades del mundo, entre ellas Barcelona y Lisboa.
Qué dice Fundapatrimonio
El equipo de Crónica.Uno se comunicó con María Elisa Domínguez, presidenta de la Fundación para la Protección y Defensa del Patrimonio Cultural de Caracas (Fundapatrimonio), ente adscrito a la Alcaldía del Municipio Libertador, quien aseguró la empresa privada Restaura tiene la concesión de los paraguas en el pasaje Linares.
Deberían volver a colocarlos”, añadió Domínguez.
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Ciudadanas como Teresa Lara creen que los paraguas necesitan mayor mantenimiento para que puedan perdurar por más tiempo, ya que la última vez que los vio estaban “muy feos”, debido al sol y la lluvia.
A pesar de que apoya este tipo de iniciativas en la ciudad, también piensa que las autoridades municipales “deberían ocuparse de otras cosas”, las cuales ella considera de mayor prioridad, como “la salud y la educación”.
Ornamentar la ciudad está bien, pero también hay que ocuparse de otras cosas que por lo que uno ve, están muy deterioradas”, dijo Lara.
Los paseos por Caracas
Los paseos nocturnos por el centro de Caracas, organizados por la Fundación Historia Ecoturismo y Ambiente (Fundhea), ahora no incluyen este punto en sus recorridos, a pesar de ser uno de los más aclamados por los asistentes.
Muchos turistas han llegado allí y quieren ver los paraguas porque para todos han sido una referencia. Es algo que ya es un icono de Caracas y se pensó que para el aniversario de la ciudad (el pasado 25 de julio), iban a colocar unos nuevos y la gente se sintió desilusionada”, comentó Derbys López, fundador de Fundhea.
El recorrido de Caracas nocturna de Fundhea también incluye el Arco de la Federación, las escaleras de El Calvario, Villa Santa Inés, Plaza O’Leary, Plaza Caracas y de ahí solían ir al también llamado “pasillo de los paraguas”. Luego siguen a la calle donde está la casa de Simón Bolívar, la esquina de gradillas y la Plaza Simón Bolívar.
Los alrededores
La Casa Natal de Simón Bolívar sigue cerrada, a pesar de que en mayo pasado presuntamente fue reinaugurada, según reseñó VTV. Sin embargo, el viernes, 28 de julio, se encontraba cerrada y el Museo Bolivariano continúa en proceso de restauración, aproximadamente desde abril pasado.
Pero los locales también se quejan del cierre. “Nosotros veníamos a visitar la casa del Libertador pero resulta que está cerrada”, mencionó Aurelis Rodríguez, quien caminaba este viernes, 28 de julio, por el centro junto con su nieto Ender, de nueve años de edad.
Ambos, en algún momento, también se tomaron fotos bajo los paraguas del centro. Para ellos fue una experiencia “muy bonita”, por lo que les gustaría que volvieran, aunque piden a sus encargados que les den mayor mantenimiento.
Historia del pasaje Linares
En su momento, el pasaje Linares fue lo que ahora sería catalogado como un centro comercial, solo que en 1890, cuando fue inaugurado, estos espacios comerciales eran prácticamente al aire libre o funcionaban en la planta baja de algún edificio, como era el caso del Pasaje Zing.
En 1590, aproximadamente, en el pasaje Linares funcionaba el convento de San Jacinto. El nombre tiene relación con quien solía ser propietario de los locales del pasaje, el señor Esteban Linares, según datos de Fundhea.
Los comerciantes del Mercado de San Jacinto, el cual está justo al lado del pasaje, no tienen información de por qué quitaron los paraguas o de si los van a volver a poner. “Ya estaban muy viejos”, dijo Cristiel, trabajador del lugar.
“Se ve diferente, la diferencia es grande”, añadió Gloria, otra comerciante del mercado sobre lo diferente que se ve el pasaje sin los paraguas.
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