Recordando las escenas del llamado paro petrolero de 2002, cuando a diario se escenificaban protestas en defensa de la meritocracia, este viernes trabajadores tomaron el patio central del edificio sede de la estatal petrolera Pdvsa, ubicado en Puerto La Cruz, exigiendo salarios dignos.

Puerto La Cruz. Los trabajadores protestaron en defensa de la cláusula 36 de la contratación colectiva vigente. Dicha cláusula indica que el salario de los empleados de la industria petrolera nacional se incrementará de acuerdo con el porcentaje que indique el Gobierno con respecto al salario mínimo, por lo que, luego de que el Ejecutivo decretara el último aumento general tras la entrada en vigencia del nuevo cono monetario, es evidente que esto no se ha cumplido y lo que reciben son “salarios de hambre”.

Una empleada, que ocupa un cargo gerencial en la empresa mixta PetroSinovensa, y quien prefirió no dar a conocer su nombre por temor a represalias, contó al equipo de Crónica.Uno lo que se vive actualmente en esa dependencia.

“Mi última quincena fue una tristeza, apenas cobré 1.143 soberanos y aún estamos esperando la famosa discusión de la contratación colectiva. Nos pasaron una nota de interés en donde nos dicen que tuviésemos paciencia, que este salario era transitorio, pero por los vientos que soplan lo vemos más fijo que transitorio. La cosa está tan mal que autorizaron la contratación de 300 personas para una parada de planta y apenas han contratado a 23… Con esos sueldos que estamos devengando yo no sé qué producción ven a levantar, esto está quedando solo”, sostuvo.

En lo que respecta a la llamada TEA (Tarjeta Electrónica de Alimentación), la empleada indicó que la misma se hizo efectiva en la mañana de este viernes y que el aporte fue apenas de 343 bolívares soberanos. “Eso alcanzará para medio cartón de huevos y de broma”.

En la calle

El pasado miércoles, la autopista José Antonio Anzoátegui se inundó de bragas rojas, luego que más de 2.000 trabajadores marcharon desde el sector Potocos hasta el complejo petroquímico de Jose.

José Bodas, secretario general de la Federación Única de Trabajadores Petroleros (Futpv), indicó que la clase trabajadora no está dispuesta a renunciar a las contrataciones colectivas y mucho menos a aceptar salarios de esclavitud.

“El Gobierno pretende legalizar el hambre en Venezuela con un salario que significa menos de un dólar diario. Quiere aplicar un paquetazo neoliberal y capitalista al extremo, al eliminarle el pago a los importadores, a las transnacionales petroleras, a Pdvsa y nos aumenta el IVA a 16 %. Los alimentos están en precios exorbitantes, más caros que a precio internacional. Nos quieren imponer unas tablas salariales donde lo máximo a ganar son dos salarios mínimos y medio. Eso es inaceptable. Llamamos a la coalición gremial a unirnos todos por la lucha salarial”.

Bodas acusó al dirigente sindical Wills Rangel de actuar en favor del patrono y no de los trabajadores, que es el deber ser de todo dirigente.

“Por culpa de estos dirigentes que no defienden al trabajador es que nuestros hijos aún no pueden ir al colegio porque no tienen calzado, ni mucho menos comida. Los trabajadores que cobran semanal apenas devengan 100 bolívares soberanos. Eso es inaceptable. Los trabajadores reclaman y lo que hacen es perseguirlos por defender sus derechos y defender la autonomía sindical.

Fotos: José Camacho


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