Las fallas de electricidad de los últimos días han generado malestar entre los habitantes del Litoral Central, especialmente de quienes residen en Catia La Mar, Maiquetía, La Guaira y Macuto, donde también se suman las fallas en el servicio de Internet. El gobernador García Carneiro reconoció en octubre pasado la crisis del servicio eléctrico en su jurisdicción.

La Guaira. Aunque recientemente la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) informó por sus redes sociales sobre el mantenimiento de cableados y sistemas de generación de energía, los apagones han reaparecido en varias zonas del Litoral Central.

Los últimos apagones, sin previo aviso ni explicaciones técnicas, perjudican a los sectores más poblados de la región, en especial los del centro y oeste de la entidad: Carayaca, Catia La Mar, Maiquetía, La Guaira y Macuto.

Nos tienen la vida de cuadritos, nos quitan la luz por cinco o seis horas todos los días, sin importarles que se nos dañen las neveras, los aires acondicionados, los ventiladores, y no responden por esto, comentó Jacinta Pérez, del sector Tirima, en Carayaca, al oeste del Litoral.

Durante la semana anterior (última de cuarentena radical de 2020), los apagones y fallas eléctricas se sumaron a las lluvias que aumentaron el caudal de ríos y quebradas. La mayoría de sus cauces permanecen obstaculizados con maleza, arbustos, basura, escombros y distintos sedimentos.

“Quiero pensar que este desastre con la luz, que no deja hacer nada productivo, se va a terminar cuando esa gente se vuelva a adueñar de la Asamblea Nacional”, dijo Juana Almeida, habitante del bloque 6 de la urbanización 10 de Marzo en Maiquetía. En esa zona, como en otras de esa parroquia, han sufrido hasta 20 horas sin el servicio eléctrico.

Algunos creen que las reparaciones efectuadas por Corpoelec de la subestación Puerto, en Maiquetía, en octubre pasado, no se hicieron adecuadamente. En aquella ocasión, el gobernador de La Guaira, Jorge Luis García Carneiro, reconoció el problema.

Desde entonces es esta guachafita de los apagones casi todos los días y, por supuesto, las fallas de Internet que les dificulta a los muchachos hacer las tareas que les mandan de la escuela, opinó Maritza Verde, quien reside en el barrio Brisas del Aeropuerto.


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