La exploración de las aguas territoriales del delta culminó en 2008 con el descubrimiento de un solo pozo de gas natural no asociado que nunca se desarrolló. En 2018 el gobierno de Maduro rechazó vender a BP la participación de la francesa Total, que desde entonces sigue reduciendo su presencia en el país.

Caracas. El gobierno de Nicolás Maduro declaró como devuelta a la República la totalidad del área del bloque N°4 de la Plataforma Deltana, que desde 2003 había sido delimitada a las empresas Equinor Energy Venezuela AS y TotalEnergies EP Venezuela BV para su exploración y explotación de gas natural no asociado.

La decisión, publicada en Gaceta Oficial N° 42.439 del 12 de agosto, se tomó luego de que en diciembre de 2021 los representantes legales de ambas multinacionales formalizaran la renuncia a la licencia que les permitía ejercer actividades relacionadas con hidrocarburos gaseosos en ese territorio.

La licencia otorgada en febrero de 2003 por el entonces denominado Ministerio de Energía y Minas le permitía, en principio, a Statoil Venezuela (Equinor a partir de 2018) el derecho a explorar y explotar aguas territoriales venezolanas al este del estado Delta Amacuro durante 35 años.

La negociación inicial 

Para recibir la licencia, Statoil canceló $32 millones por concepto de bono a Venezuela en el acto de presentación de ofertas y una carta de crédito de cumplimiento por 60 millones de dólares para garantizar las obligaciones asumidas por el programa mínimo exploratorio.

En enero de 2006, Statoil cedió 49 % de su participación en el bloque N° 4 de la Plataforma Deltana a TotalEnergies. En un principio, el área disponía de una superficie de 1433,49 kilómetros cuadrados y tres campos, pero actualmente –señala el Ministerio de Petróleo– solo comprende 201,3 km2 y dos bloques del campo Cocuina.

La resolución de MinPetróleo señala que en 2008 se cumplió la perforación de tres pozos. En dos de ellos no se encontraron condiciones para desarrollo comercial y en Cocuina se descubrió gas no asociado.

Sin embargo, las empresas determinaron que no era factible económicamente desarrollar el campo de forma individual y no se ejecutaron planes de desarrollo y explotación, por lo que la renuncia no contempla la transferencia de activos a Venezuela.

Gobierno rechazó una oferta

En noviembre de 2018, la agencia Reuters reportó que el gobierno venezolano rechazó una oferta de la empresa británica BP para comprar la participación de Total en el bloque de gas de la Plataforma Deltana.

El acuerdo, según fuentes citadas por Reuters, esperó por la aprobación del gobierno durante dos años. El Ministerio de Petróleo argumentó, antes de rechazar la oferta, que las reservas del área debían ser reestimadas, pese a que 10 años atrás ya se había explorado por completo.

El interés de BP en el espacio se debía a que poseía los derechos de desarrollo de gas natural en la isla de Trinidad y buscaba usar la producción de la Plataforma Deltana para alimentar sus operaciones en ese país.

A inicios de agosto, Nicolás Maduro recibió en el Palacio de Miraflores al ministro de Energía e Industrias Energéticas de Trinidad y Tobago, Stuart Richard Young, en una reunión en la que también estuvieron el ministro de Petróleo, Tareck El Aissami, y el presidente de Pdvsa, Asdrúbal Chávez. “El Gobierno de Trinidad y Tobago ha planteado la búsqueda de fórmulas para la normalización del suministro gasífero y petrolero a nivel mundial”, dice una nota de prensa del Ministerio de Comunicación.

¿Futuro?

Reuters refiere que Total intentó vender su 49 % de participación en consonancia con la reducción de presencia en Venezuela de algunas petroleras extranjeras por el riesgo de las sanciones a la industria, que en 2018 comenzaban a escalar.

En julio de 2021, la multinacional confirmó que decidió transferir su participación minoritaria de 30 % en Petrocedeño a la Corporación Venezolana de Petróleo (CVP), filial de la estatal Pdvsa, y Equinor hizo lo propio con su 9,67 %. Expertos aseguraron que Petrocedeño era el proyecto más grande de la Faja del Orinoco y posiblemente el de mayor inversión privada en la historia petrolífera de Venezuela.

Actualmente, TotalEnergies mantiene su presencia de 65,9 % de participación en el proyecto Yucal Placer con una empresa mixta que, de acuerdo con Bloomberg, produce 1,5 millones de pies cúbicos diarios de gas. El medio, sin embargo, reportó en febrero de este año que la multinacional francesa estaría acordando su salida del negocio petrolero en el país.

Con la renuncia de Total y Equinor al bloque 4 de la Plataforma Deltana, señala la resolución del Ministerio de Petróleo, “el Estado podrá disponer de la misma” para establecer estrategias que desarrollen los proyectos gasíferos.

Pero la industria, en sintonía con la economía nacional, se encuentra en cifras mínimas. La Asociación Venezolana de Productores de Gas (AVPG) calcula que en 2021 el país produjo 40 % menos gas que cinco años atrás y para llegar a ese nivel se requieren, al menos, inversiones por el orden de los $18.000 millones, más de lo que se prevé que perciba la nación por renta petrolera este año.

Lea también:

Duplicar la producción nacional de gas natural hasta 2030 requiere una inversión de más de $18.500 millones

“El negocio del gas natural tiene que ser sustentable, no puede seguir dependiendo del petróleo”

Qué implica la salida de Venezuela de las empresas Total y Equinor para Pdvsa


Participa en la conversación