Los tiroteos en varias zonas de Caracas obligaron a suspender las actividades de dos equipos del fútbol profesional y otros entes, como el Comité Olímpico Venezolano (COV), que tenía pautada una rueda de prensa para informar sobre los Juegos de Tokio 2020.

Caracas. La situación de violencia en el oeste de Caracas trastocó esta semana las actividades deportivas de varios equipos e instituciones, que se vieron obligadas a suspender entrenamientos y posponer eventos por razones de seguridad.

Desde hace dos días en la Cota 905 se producen tiroteos que afectan la parte baja de El Cementerio, El Paraíso, avenida San Martín, El Valle (en total cinco parroquias), entre otras, que han dejado varios heridos y por lo menos seis fallecidos, así como la paralización de la actividad comercial y deportiva en la zona.}

Los equipos profesionales del Caracas FC y el Atlético Venezuela tenían previsto entrenar este jueves 8 en el colegio San Agustín de El Paraíso y el estadio Brígido Iriarte, respectivamente, y no pudieron hacerlo por los tiroteos y la actuación de bandas delictivas que operan en la zona.

El Comité Olímpico Venezolano (COV), por su parte, tenía pautada una rueda de prensa para este jueves donde iba a entregar credenciales y a informar sobre la delegación de Venezuela en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio, pero en horas de la mañana confirmó la cancelación de dicho encuentro con los medios.

En El Paraíso también hacen vida escuelas deportivas y hay otros escenarios como el Parque Naciones Unidas donde se practica baloncesto y natación que seguramente vieron alteradas sus rutinas, al igual que la del Instituto Nacional de Deportes en Montalbán, lugar de entrenamiento de muchos atletas y de trabajo de numerosos dirigentes, quienes también hacen uso del comedor y otras áreas de la instalación.

CFC afectado

Uno de los equipos más afectados por la situación de violencia en el oeste de la capital es el Caracas FC, que tiene su sede y lugar de entrenamientos en la Cota 905 y además cuenta con la casa club, donde viven algunos deportistas de las categorías menores. Además, el plantel avileño tiene las residencias en la avenida Páez de El Paraíso y allí también habitan algunos futbolistas del plantel profesional.

“Yo vivo en El Paraíso y no estamos tan cerca, pero sí escuchamos los disparos. Suspendieron los entrenamientos y creo que mañana y pasado también”, contó un futbolista de los Rojos que pidió no ser identificado.

“Últimamente estamos entrenando en el colegio San Agustín porque es más seguro que Cocodrilos en la Cota 905. Nos estamos cuidando y por ahora estamos encerrados. En la noche se escuchan los tiros a lo lejos, pero tratamos de no salir”, agregó el jugador capitalino.

Ya hace años, a mediados de los 2000, cuando el control de las bandas delictivas en la Cota 905 no era tan marcado como en la actualidad, y el Cocodrilos era sede de los partidos del Caracas, un futbolista fue rozado por una bala perdida cuando iba a jugar un compromiso de la Primera División. Este 2021, al menos una vez, el equipo tuvo que mudar a los jóvenes de la casa club a un hotel por razones de seguridad, debido a los tiroteos y a la violencia en zonas cercanas.

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