El plan contempla recorrer el país y organizar la Unidad Democrática en los estados, denunciar ante instancias internacionales, como la Unesco y la OIT, la situación de la educación en Venezuela.

Caracas. Los maestros realizaron este jueves la instalación del encuentro La educación unida no se rinde. ¡Es hora de cambiar! en el salón Simón Bolívar de la Universidad Experimental Pedagógica Libertador (UPEL). Este evento representa lo que el sector definió como la ruta democrática para salvar la escuela y la educación.

La Unidad Democrática del sector educación estará convocando a los educadores, estudiantes, padres y representantes, a que nos unamos en una gran asamblea ciudadana para discutir la ruta programática educativa y el programa de reconstrucción nacional, dijo la coordinadora nacional de la Unidad Democrática, Raquel Figueroa. Instancia que surgió de la proclama Venezuela Unida no se rinde del pasado marzo en la Universidad Central de Venezuela.

Nos vamos a organizar para la defensa de la educación, para salvar la educación democrática y el sistema democrático, agregó.

La lectura del manifiesto estuvo a cargo de María Cerezo, miembro de la directiva de la Federación Venezolana de Maestros (FVM):

Nos negamos a que sigan destruyendo nuestra escuela como espacio de formación y encuentro social. Frente al desastre, el sector educativo ha decidido organizarse para no darle más tiempo al despotismo, es la hora del protagonismo ciudadano y del maestro para intervenir determinantemente en la reconstrucción y en las grandes decisiones del país.

Entre las acciones que tomarán los docentes está un pronunciamiento sobre las elecciones presidenciales del 20 de mayo. Vamos a solicitar condiciones, no legales, sino humanas, como la libertad y la democracia para que pueda haber un proceso electoral, expresó Figueroa.

Plan de ruta

El plan de ruta contempla recorrer el país y organizar la Unidad Democrática en los estados, denunciar ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura y la Organización Internacional del Trabajo, el estado de la educación en Venezuela: diáspora, deserción, la exclusión y el escaso financiamiento de las escuelas y liceos.

También las violaciones y el acoso laboral que sufren los docentes, aquellos que han rechazado en sus planteles la politización. Queremos ir a las embajadas para denunciar que acá en Venezuela no existe una educación libertaria, de calidad, aseveró Figueroa.

El evento contó con la participación e intervención de diversos gremios y organizaciones educativas: FVM, la dirección del Instituto Pedagógico de Caracas, Congreso Nacional de Juventudes, la Asociación de Profesores de la Universidad Experimental Libertador y la Asociación Civil de Educadores de la Región Capital.

El presidente de la FVM, Orlando Alzuru, destacó que la educación está peligro dado que los maestros no encuentran atractivo en la oferta salarial. Sobre la firma de la segunda convención colectiva dijo:

Nosotros dijimos muchas veces que no nos hiciéramos ninguna esperanza con respecto al contrato colectivo. No es el contrato colectivo el que nos podía resolver el problema que atravesamos, porque cualquier aumento de salario, reivindicación, no lo va a resolver.

Crisbelly Coromoto Pérez, estudiante de quinto año de bachillerato y miembro del Congreso Nacional de Juventudes, lamentó que cada día sean más los pupitres que se quedan vacíos en las aulas, que los estudiantes se debatan entre ir a estudiar o trabajar. Y rechazó la figura de jóvenes del Plan Chamba Juvenil como profesores.

Si ayer el sector educativo no se rindió ante la pretensión de la resolución 1.011, si no nos rendimos con la imposición del diseño curricular de la resolución 058, ahora menos nos rendiremos. Estamos luchando por una democracia, por la libertad, por una educación democrática, concluyó Figueroa.

Foto: Carmen Victoria Inojosa


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