Miguel Montero, Wilson Contreras y Héctor Rondón aportaron su granito de arena para que los Cachorros rompieran la sequía en el Clásico de Otoño.

Caracas. “Nosotros nunca creímos en eso”, aseguró el receptor venezolano Miguel Montero al ser consultado por medios estadounidenses sobre la mítica Maldición de la Cabra, que los Cachorros de Chicago se encargaron de deshacer con la victoria 8-7 en el séptimo y decisivo choque de la Serie Mundial de beisbol ante los Indios de Cleveland.

Más allá del escepticismo del caraqueño de 33 años, su sencillo al jardín izquierdo en el décimo inning ante los envíos del relevista Bryan Shaw marcó la diferencia para quebrar el hechizo del mamífero bautizado como Murphy que está en boca de todos en la pelota desde el Clásico de Otoño de 1945, en el que los oseznos recibieron maldiciones del dueño de la mascota por no poder ingresarla a Wrigley Field.

La coronación de los Cubs en casa de la tribu elevó a 57 el número de venezolanos con anillos de campeones en las 112 ediciones de la final de las Grandes Ligas. Además de Montero, el también cátcher Wilson Contreras y el relevista Héctor Rondón recibirán la distinción al igual que los coaches Henry Blanco y Franklin Font.

“No puedes llenar las bases para enfrentarme. Ahí están mis números”, señaló luego del partido Montero, quien apenas jugó dos partidos en toda la postemporada, pero fue capaz de impulsar cinco rayitas con el madero. En total, el magallanero se fue de 12-2 en los playoffs. “No tenía pensado que iba a jugar. Me pusieron en la situación más difícil posible, porque no los había enfrentado [a los Indios]. Como receptor uno tiene un poquito de idea, pero no es lo mismo estar en la banca”, admitió el criollo.

Contreras también aportó

El poco tiempo de juego de Montero en los playoffs se debió al excelente desempeño de su compatriota Contreras detrás del plato. El carabobeño de 24 años también empujó una en el partido que le dio el cetro a Chicago.

“Gracias a los Cubs por confiar en mí, por darme la potestad de abrir muchos juegos en la Serie Mundial”, afirmó el careta, que se ganó la titularidad y bateó .256 en las rondas definitorias. El criollo que se quedó calentando el brazo en el bullpen fue el relevista Héctor Rondón, ganador de un juego en la postemporada.

Los tres venezolanos volvieron este viernes a Chicago para formar parte del desfile de celebración de los monarcas por las calles de la llamada Ciudad de Los Vientos.

Foto: AP


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