José Ramón Márquez Batista murió por un impacto de bala en el tórax en un supuesto operativo policial en San Blas, Petare. Desde niño nunca pudo sacar su cédula por un error en la partida de nacimiento, según sus familiares.
Caracas. José Ramón Márquez Batista, de 18 años de edad, salía para ir a trabajar la mañana del viernes, 7 de abril. Iba junto con otros tres amigos a buscar a un compañero de trabajo a su casa en el sector La Pajarera de San Blas, en Petare. Al llegar fueron abordados por funcionarios de seguridad.
Cuando Miriam Márquez, madre de José Ramón, llegó al sector, no tenía claro qué pasaba. Creía que su hijo había sido detenido y trasladado a la sede de la Policía del Municipio de Sucre, en La Urbina. Horas después, se enteró de que José Ramón murió por un impacto de bala en el tórax, en un supuesto operativo policial en San Blas.
Los amigos de José Ramón, quienes se encontraban con él en ese momento, fueron detenidos esa mañana y liberados el mismo día en la noche, de acuerdo con el testimonio de Miriam. La madre denunció que en el sitio había varias personas que indicaron que los funcionarios le pidieron la cédula a los jóvenes pero José Ramón no tenía documentos.
“A él lo metieron al baño y lo mataron nada más por no tener una cédula. Él fue el único que salió muerto”, dijo Miriam Márquez, madre de la víctima.
Miriam Márquez contó, en la medicatura forense de Bello Monte, que la vivienda donde ocurrieron los hechos fue arropada por numerosos miembros de cuerpos de seguridad, incluyendo al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y la Brigada de Acciones Especiales (BAE).
Problema con documentos de identidad
Miriam manifestó que nunca pudo sacarle la cédula a su hijo por un error que tenía su partida de nacimiento. “Siempre tuve que explicar el problema de la partida de nacimiento. Este caso está en la fiscalía desde el año pasado. Yo, como madre preocupada, siempre planteaba el motivo, el por qué él no tenía cédula”.
La familia informó que el joven se dedicaba a vender chupetas y limpiaba vidrios por Las Mercedes, Chacaíto y Plaza Venezuela. También, contó que estudiaba bachillerato en las noches, era jugador de basquetbol y dejó huérfana a una niña de siete meses. Tenía menos de dos años viviendo en esa zona de Petare. Era oriundo de Barlovento, estado Miranda.
Operativos en San Blas
Según información extraoficial, el pasado viernes, 31 de marzo, fallecieron ocho personas en un presunto operativo del Cicpc, el Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) y la Dirección Contra la Delincuencia Organizada (DCDO) también en San Blas. Sin embargo, solo fueron identificadas cuatro personas: Iván José Valdespino López, Víctor José Genis Villa, Andy Estyben y Ruíz Velasco.
Adicionalmente, en la morgue de Bello Monte, se conoció que René Ávila, de 33 años y José Ramón Quintana, de 18 años de edad, murieron en una operación extrajudicial en San Blas el mismo día.
La ONG Lupa por la Vida documentó que en 2022 policías y militares asesinaron a 824 personas en Venezuela en presuntas ejecuciones extrajudiciales. De ellas, solo 501 pudieron ser identificadas, mientras que la identidad de las otras 323 aún se desconoce.
Según el informe la Policía Nacional Bolivariana (PNB) originó 196 víctimas fatales, mientras que el Cicpc dejó 142.
Muerto en Catia
El mismo viernes, 7 de abril, Johan Brito, de 22 años de edad, murió por un impacto de bala. Sus allegados contaron que fue abordado para robarle la moto, en la recta de los Magallanes de Catia, y le dispararon en el estómago.
Brito fue trasladado al hospital de los Magallanes de Catia, donde falleció. Trabajaba en la sede administrativa del Unicasa, en Los Cortijos.
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