El diputado de Voluntad Popular agradeció a los funcionarios diplomáticos mexicanos, quienes le dieron hospedaje en calidad de invitado por más de 130 días. Confirmó que él, su esposa y sus hijas de 7 años salieron de Venezuela hacia Colombia vía terrestre. Agradeció a “un capitán de la GNB que comprendió lo que es la inmunidad parlamentaria”.
Caracas. “Me negué a ser utilizado como ficha de intercambio”. Así explicó este lunes el diputado por Miranda, Franco Casella, su decisión de fugarse de la embajada de México en Caracas —donde se encontraba en condición de huésped desde el 14 de mayo— y cruzar la frontera a pie hacia Colombia.
En un video de 6 minutos difundido en redes sociales, Casella contó que en días recientes sus anfitriones le hicieron saber que el gobierno de Nicolás Maduro —a través de Delcy y Jorge Rodríguez— le hizo a México una propuesta de tres pasos: uno, el gobierno de México le daría asilo al diputado alojado en su embajada en Caracas. Dos, el gobierno de Maduro le concedía un salvoconducto al diputado para que abandonara el país. Y tres, todo el trámite aparecería ante la opinión pública como resultado de la mesa de diálogo instalada la semana pasada.
“Ante esta situación me negué rotundamente a ser utilizado como una ficha de intercambio de esa falsa mesa de diálogo y de los hermanos Rodríguez y tomé la decisión más peligrosa: la de fugarme”, dijo el parlamentario electo por Miranda.
Casella, que ya había hecho pública su huida del país este viernes 20 de septiembre a través de otro video, exculpó de su evasión a la embajada mexicana y su personal. Agradeció el apoyo del gobierno mexicano durante más de cuatro meses, pero consideró que la postura “equilibrada y proactiva” que caracteriza a la Cancillería de ese país, “se vio afectada ante la proposición” del madurismo.
Relató que abandonó Venezuela por vía terrestre hacia Colombia junto con su esposa y dos niñas de 7 años, y que, en movilizaciones separadas, pasaron más de 35 alcabalas de la GNB.
“Por alguno de estos pasos que existe a lo largo y ancho de esta frontera pudimos cruzar arriesgando la vida, sometidos a mucha presión, en una operación en paralelo, por una parte mi esposa y mis hijas y por la otra parte yo, salvando más de 35 alcabalas de la GNB”, contó.
Aunque dijo que en dos oportunidades estuvo en riesgo de ser detenido, también agradeció “la conciencia de ese capitán de la GNB que logró comprender lo que es la institución de la inmunidad parlamentaria”, dando a entender que ese funcionario le permitió el paso.
Casella, que es vicepresidente de la subcomisión de Derechos Humanos de la comisión de Política Interior de la AN, expresó su solidaridad con sus colegas diputados presos, clandestinos o en el exilio, y a todos los presos políticos “a quienes están en los calabozos del régimen siendo torturados, siendo amedrentados y ahora pretendiendo ser utilizados como fichas de intercambio por parte de este régimen”.
Dijo que continuará desde el exterior su trabajo para respaldar la gestión de Juan Guaidó como presidente encargado y la agenda de tres pasos: cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres.
Casella forma parte de los 14 diputados perseguidos solo en mayo de este año— por el trío conformado por el Ministerio Público, la Constituyente y el Tribunal Supremo de Justicia, a quienes se les pretendió despojar de su inmunidad parlamentaria por su respaldo a Guaidó.
Participa en la conversación