El director de la policía científica, comisario Douglas Rico, dijo que investigan a una banda dedicada al robo de vehículos. El funcionario de Poliguaicaipuro y su acompañante fueron localizados desmembrados, quemados y enterrados en Guatire.
Caracas. El director del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), comisario Douglas Rico, informó que seis personas, o más, podrían estar involucradas en el homicidio del oficial de la Policía del Municipio Guaicaipuro (Poliguaicaipuro) y su suegro, en el sector Colinas de Valle Verde del barrio Moscú, en Guatire, estado Miranda.
La mañana de este viernes notificó que a través del rastreo telefónico por el celular de ambas víctimas, dieron con uno de los presuntos implicados: Eduardo Rosas, quien reside en la misma comunidad donde ocurrieron los hechos.
Explicó que el móvil fue el robo e investigan que se trate de una banda delictiva dedicada al robo de vehículos, para después desvalijarlos y vender sus piezas.
Trascendió que están tras la pista de Jefferson, “el Chino” y “el Colombiano”. Aún no ha aparecido la camioneta Cherokee en la que se trasladaban las víctimas.
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El oficial de Poliguaicaipuro, Yorman Hawer Machado Matos, de 25 años, y su suegro Carlos Moya, de 50 años, desaparecieron el pasado jueves 1° de diciembre cuando salieron del kilómetro 4 de El Junquito.
Según versiones extraoficiales, Moya, quien era mecánico, iba a comprar unos repuestos y cancelaría en efectivo, por seguridad le pidió al oficial que lo acompañara.
Ese día el funcionario se comunicó con su esposa a las 5:05 a. m. y se refleja que se encontraba en El Valle. Intentaron llamarlo tres horas después a los dos y ninguno contestó.
Ambos fueron hallados descuartizados, calcinados y enterrados en una zona boscosa del barrio Moscú en Guatire, el pasado miércoles 7 de diciembre. Una comisión del eje de Homicidios del Cicpc localizó a uno de los involucrados y luego de rastrear la zona les llamó la atención la presencia de zamuros en el área, caminaron hasta dar con los restos, donde había signos de combustión reciente.
El policía vivía en Ciudad Tiuna y era padre de tres niños, dos gemelos de ocho meses y una hembra de tres años. Se presume que Moya fue citado bajo engaño por un proveedor particular con intenciones de robarlo.
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