En el barrio José Félix Ribas llevan más de 50 días sin el servicio; en Guaicaipuro Sur, en la avenida Andrés Bello, 10 días; en algunas partes de la parroquia Altagracia llevan de dos semanas y en Santa Elena, parroquia San José, están secos desde hace una semana.
Caracas. Ya se cumplió un mes desde que anunciaron los primeros casos positivos de COVID-19 en el país, ese es el mismo tiempo que tienen los problemas de escasez de agua en la región capital y todavía no hay soluciones, por el contrario, los reportes de sectores sin agua potable siguen en aumento. Ciudadanos y dirigentes vecinales exigen a las autoridades que restablezcan el servicio.
En el barrio José Félix Ribas llevan más de 50 días sin el servicio; en Guaicaipuro Sur, en la avenida Andrés Bello, cuentan 10 días sin agua; en algunas partes de la parroquia Altagracia llevan más de dos semanas sin el suministro; y en Santa Elena, parroquia San José, están secos desde hace una semana.
Asimismo, en Puerta Caracas, ubicada en La Pastora, se reportan 15 días; mientras que vecinos del sector José Ramón Figuera en Charallave solo se surten de agua cuatro días a la semana.
El agua se va el martes y la vuelven a poner el sábado. Ese día dura pocas horas, la quitan y otra vez nos abastecen hasta el martes. Pasamos sin agua desde el martes en la tarde hasta el fin de semana. Tenían tiempo que no racionaban de esa manera, pero menos mal que tenemos pipotes llenos y un tanque por si acaso“, dijo Michael Otamendi, habitante del sector José Ramón Figuera.
La falta de agua impide que se pueda cumplir con las medidas de prevención que ha reiterado en varias ocasiones la Organización Mundial de la Salud y el Gobierno para prevenir el COVID-19.
Al menos 80 % de la capital queda constantemente sin servicio de agua debido a las fallas que presentan los sistemas de distribución Tuy II y III. La organización Monitor Ciudad cuenta con actualización constante sobre los sectores que están sin agua. En su último informe reportaron que 23 % de los caraqueños recibe el suministro una vez a la semana.
Por su parte, Primero Justicia Sucre denunció este 16 de abril que en algunas partes de las urbanizaciones Lomas del Ávila y Terrazas del Ávila, ubicadas al norte de la parroquia Petare, cumplen 10 días sin servicio de agua potable.
Los voceros fueron los dirigentes Andrés Schloeter, Pedro Méndez y Juan Carlos Vidal, quienes aseguraron que Hidrocapital ejecuta un cronograma de suministro “discriminatorio” en las zonas mencionadas.
Otros sectores de estas urbanizaciones contabilizan cuatro días sin el servicio. Tanto el Instituto Municipal de Aguas de Sucre (IMAS) como la empresa hidrológica no han informado al respecto.
Además, exigieron a ambos organismos que abastezcan de agua porque “a diario se están aglomerado cientos de personas que vienen de distintos puntos de la ciudad, lo que los pone en riesgo de propagación de la pandemia”.
Poco bombeo
Miembros del Observatorio Vecinal informaron a través de Twitter que el alimentador norte del sistema Tuy II se encuentra en recuperación, por lo que se van a abastecer paulatinamente varias zonas de la capital.
Usuarios de la red social reportaron que aún no llega agua a algunos sectores como Cerro Verde, Pomelos y Llano Verde, y que enviaron a una cuadrilla de Hidrocapital a este alimentador debido a que la presión de bombeo es baja.
Botes de aguas blancas
Aunado a la falta de agua potable, las denuncias de botes de aguas blancas —que perjudican las calles y avenidas— se hicieron eco entre los caraqueños.
Dirigentes de Primero Justicia Sucre indicaron que, frente a la iglesia San Rafael Arcángel, ubicada en la urbanización Lomas del Ávila en Palo Verde, hay un bote de aguas blancas que califican como “una pérdida importante del servicio”.
También se reportan botes en algunos sectores de Prados del Este, La Unión, Los Naranjos, Charallave y Puente de Hierro.
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