Especialistas en opinión pública señalaron que la Unidad Democrática debe hacer cambios en su estructura y en su vocería para reducir las contradicciones en sus mensajes a los ciudadanos.
Caracas. Aunque asesores y dirigentes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) reconocen públicamente que la organización adolece de fallas de comunicación desde hace años, estas no son corregidas. Incluso, la instancia vuelve a cometer errores que había admitido.
El ejemplo más reciente tuvo lugar con la nueva tentativa de diálogo entre Gobierno y oposición, que se conoció, no por los dirigentes de la coalición, sino a través del canciller francés Jean-Yves Le Drian, que informó sobre las conversaciones.
Es como volver a lo que ocurrió a finales del año pasado donde se negó el diálogo y las reuniones y el Gobierno se encargó de hacer ver que sí ocurrían. Filtró las reuniones y eso minó la credibilidad de la Mesa”, señaló Elías García Navas, experto en manejo de crisis.
Tanto Navas como el politólogo Ricardo Sucre atribuyen la recurrencia en las fallas a la casi total desaparición de una estructura de coordinación dentro de la coalición y la ausencia de voceros y canales de comunicación oficiales, lo que, a su vez, provoca que no haya líneas comunicacionales definidas, ni formas claras de comunicarlas. “Desde que la Mesa se fundó ese problema está ahí. Hay dos factores: la comunicación requiere claridad de ideas y unidad de mando”, expresó Sucre, quien también fue asesor de la MUD.
Sucre indica que luego de 2014- poco después de la salida de Ramón Guillermo Aveledo- se inició un proceso de “desistitucionalización” de la alianza, que se vio acentuado este año con la eliminación de la secretaría ejecutiva -que coordinaba la organización y estaba encargada de su vocería-. “Se fue debilitando la Mesa y eso explica por qué no hay un centro que coordine las líneas de comunicación. Con Aveledo había cierta coherencia, que ahora no se tiene por la falta de institucionalidad de la MUD (…) la MUD como institución no ha podido unificar esos puntos de vista de cada partido, que salen diciendo una cosa o sus propias ideas y se ven las diferencias”, explicó.
García Navas, quien también es director de director de Monitor Américas, coincidió con esta opinión y añadió que esto provoca que se complique y retrase la toma de decisiones y que lo comunicado pierda claridad.
El comunicado más sencillo tiene que pasar por una serie de validaciones. Es como hacer una nota de prensa a ocho manos, tarda mucho. Hay que consultar internamente, y tener los vistos buenos hasta de las comas y las palabras. Entonces se termina con una nota o un comunicado que sale tarde y descontextualizado, con un contenido que ya se ha distorsionado o no se ve reflejado con acciones”.
El también consultor consideró que debe haber un cambio de estructura dentro de la Mesa que le permita diseñar y ofrecer mensajes más claros, además de responder con mayor rapidez a las exigencias del acontecer político.
Hay una falla estructural. La MUD no es un organismo cohesionado y homogéneo y su mensaje puede resultar contradictorio y a destiempo. No hay fluidez comunicacional y eso es letal, le quita credibilidad a las acciones. Está permanentemente reaccionado a la proactividad del Gobierno, que es implacable, tiene una línea de mando, mensajes definidos y una actuación pragmática”.
Sucre consideró que la Unidad tiene una ventaja actualmente pues casi todos sus integrantes están de acuerdo con dos líneas estratégicas: las conversaciones con el Gobierno y las regionales. “Es un problema de reunirse y acordar unas líneas comunicacionales y una estrategia más o menos global”.
La investigadora en opinión pública, Mariana Bacalao, analiza las fallas desde otro enfoque. A su juicio, la MUD debe dejar los “viejos esquemas” de comunicación y poner más atención en “esquemas horizontales” y de interacción como los de las redes sociales. “En todo el mundo existe un deseo profundo de ser escuchado. La gente quiere dejar atrás los esquemas en que solo se les ve como receptores o que solo se expresan en el voto, es una comunicación incompleta”.
En este sentido, recomendó “abrir espacios” para que los ciudadanos puedan formular su opiniones y críticas e “incidir” en la toma de decisiones de la alianza. “No basta con tener un community manager. Hay que escuchar y dar respuesta. La gente no solo quiere que la escuchen, no puede ser un acto demagógico el acto de comunicación, la gente monitorea el termómetro de la opinión. Lo hace de boca a boca y a través de las redes sociales tiene la data en caliente. Se habla mucho del guerrero del teclado o de Instagram o lo que sea. Pero esas personas sí tiene correspondencia con lo que pasa porque esa gente está activa en política social, sale a protestar, son influencers y marcan pauta”.
La vocería
Como parte de su reestructuración de febrero de este año —y con la eliminación de la Secretaría Ejecutiva— la alianza decidió funcionar con una “vocería rotativa”. Existen distintos portavoces designados poco antes de las ruedas de prensa, un esquema que ha sido criticado incluso a lo interno de la MUD.
Sucre recomendó designar un vocero autorizado para que se encargue de comunicar sobre lo que sucede en las conversaciones con el Gobierno. “Hay que tener voceros y anticiparse, informar lo que sucede: ‘Vamos a ir a República Dominicana y nuestros puntos serán tales. Nuestro objetivo es tal. Le siguen teniendo miedo a los guerreros del teclado. Ese sector ya no quiere nada con la Mesa. Deben anticiparse y dar información seria. El diálogo es una oportunidad para poder enrumbar las cosas, construir una ruta para 2018. Hay que manejarlo muy bien. Dar respuesta rápida. Si sabes que el Gobierno intentará tirar sus puyas, que la gente sepa cuál es la fuente confiable para dar información oportuna”.
García Navas indicó que lo sucedido con las elecciones regionales y los conflictos en las primarias son ejemplo de que el esquema rotativo no ha funcionado. En el caso de las regionales, el secretario de AD, Henry Ramos Allup, adelantó que ese partido iba a inscribir candidatos, sin que todavía hubiera un pronunciamiento oficial de la alianza, algo que luego forzó a los otros partidos a asumir una postura, sin que se hubiese diseñado una estrategia común para comunicarla.
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“No hubo una transición entre abril y julio [meses de las protestas contra Maduro] y lo que empezó en agosto. Después de la Constituyente hubo un blackout en la línea estratégica de la Unidad y lo que salió fue la decisión, uno a uno de los partidos, de irse a las regionales sin explicar lo que había pasado y la nueva estrategia, o de qué funciono y qué no funciono. Hubo un corto circuito y la gente que está definida a luchar por la salida de Maduro no tuvo suficiente información. Se trata de un grupo de personas que muy probablemente no va a votar o van votar, pero tiene una actitud crítica a través de las redes sociales y eso hace daño porque erosiona la credibilidad de la Mesa”.
Recordó que existen metodologías conocidas para llevar la comunicación en diálogos y negociaciones. Consideró que lo ideal es que alguna persona del equipo de facilitadores o mediadores sea el que informe sobre lo que se trata en las conversaciones. “Al final de cada encuentro se hace una minuta, que va a ser pública, que tiene elementos relevantes de la sesión. Una especie de reporte de lo que se hizo y habló y esa comunicación entre ambas partes es presentada por uno de los mediadores. En la búsqueda de neutralidad y de reducir los sesgos”.
Bacalao señala que, ante la “hegemonía comunicacional, el totalitarismo y el secuestro de los medios de comunicación” la mayoría de los integrantes de la MUD no ha asumido el reto de convertirse, también ellos, en canales de información y que, en ocasiones, no siguen las recomendaciones de los asesores. “Hay un sector importante dentro de alternativa que ha asumido estos compromisos y que ha vivido en carne propia lo que sucede, incluso a nivel personal, pero si no lo explicas, la gente no lo ve. Si la decisión es que tienes que manejarte en varios tableros, explícalo (…). No puedes pedirle a la gente que deje el pellejo en la calle y saltarte la misión de explicar”, expresó.
Foto referencial: Cheché Díaz
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