Desde hace dos meses solo funcionan 15 máquinas de las 20 con las que cuenta la Unidad de Diálisis Valencia Sur, debido a que por falta de agua no pueden lavar los filtros de las unidades. El IVSS lleva un año que no entrega los suplementos vitamínicos que requieren estos pacientes para mantener en óptimas condiciones su sistema inmunológico. Para poder costear el tratamiento deben contar con 500 dólares mensuales.
Valencia. Al menos 120 pacientes renales que se realizan diálisis en la Unidad de Diálisis Valencia Sur exigieron este jueves que reparen las máquinas dañadas, que mejoren la calidad del servicio eléctrico y de agua y además que se les haga entrega mensual de los suplementos vitamínicos que deben ingerir para mantener el sistema inmunológico, pues costear el tratamiento alcanza los 500 dólares mensuales. La falta de agua pone en riesgo la vida de los pacientes renales.
Desde hace un año Javier Córdova acude tres veces por semana a la Unidad de Diálisis Valencia Sur, ubicada en la avenida Las Ferias de la capital carabobeña, para realizar el proceso de diálisis. Sin embargo, desde diciembre ha venido observando como el servicio ha ido desmejorando. De 20 máquinas solo están operativas 15, esto debido a que por fallas en el suministro de agua se hace imposible cumplir con la limpieza de los filtros. Y la empresa que se encarga de esta tarea lleva dos meses que no retira los desechos de bioseguridad, lo que puede originar un foco de infección para los pacientes.
La falta de agua ha sido el detonante de todo el problema, porque los filtros no se pueden lavar manualmente. Cuando se terminan las diálisis no se pueden lavar y el filtro queda por lavar para el día siguiente. Al hacer el lavado la máquina no lo reconoce, entonces hay que hacerlo manual y como eso es un proceso automático la máquina sigue diciendo que no se ha lavado y se para a cada rato. El técnico viene, baja los filtros manualmente y vuelve hacer la operación y uno se hace la diálisis con una máquina que para cada 10 o 20 minutos”, relató.
Insistió en que han ido a Hidrocentro a solicitar que inspeccionen las tuberías que suministran el servicio del agua, porque el líquido no llega hasta el centro de salud. Con todo, no han recibido respuesta. Ante esta situación, la Unidad de Diálisis Valencia Sur debe invertir 25 dólares para comprar un camión cisterna, que se hace insuficiente para cubrir la jornada diaria. HidroDrácula en algunas oportunidades los apoya con el suministro de agua potable, pero no es constante.
Un camión cisterna aguanta para atender a los pacientes de la mañana, que son 20. Para que puedan atender en los dos turnos deben comprar dos cisternas. El agua también se acaba rápido porque hay baños que tienen filtraciones”, comentó.
Ante este escenario, en promedio se quedan sin poder hacer el procedimiento —que retira de manera artificial las sustancias tóxicas de la sangre que quedan retenidas por deficiencia renal— entre 16 y 18 pacientes diariamente. Los pacientes que se encontraban en el lugar, vociferaban: “Queremos vivir”, pues de este tratamiento depende que puedan continuar con vida.
Otra problemática que los aqueja es que desde hace un año no reciben el tratamiento necesario para mantener las defensas altas de sus sistema inmunológico. José Luis de Alessandro aseguró que no han recibido dotación de vitaminas y suplemento para mantener buen estado de salud por parte del IVSS. Deben consumir hierro, fósforo, vitamina B12, entre otros y no cuentan con los recursos económicos para costear el tratamiento, que puede alcanzar los 500 dólares mensuales.
Necesitamos mayor atención. Nosotros dependemos del IVSS, desde el año pasado estamos reclamando nuestro suministro de medicinas. La mayoría de los pacientes pagaron toda su vida Seguro Social. Los medicamentos deben llegar semanalmente. Debemos tomar complejo B12, hierro, fósforo, y otras vitaminas. El paciente que puede lo compra, porque eso está muy costoso y mucha gente no puede venir a dializarse porque no tienen dinero ni para pagar el transporte. El hierro cuesta 100.000 bolívares y en la semana debes colocarte cuatro”, sostuvo.
Los pacientes también se quejaron de las condiciones en las que se encuentra el centro de diálisis. Denunciaron que las camillas están en mal estado, los baños no funcionan, hombres y mujeres deben compartir el mismo sanitario. Al ingresar al lugar se puede observar que hay poca iluminación en los pasillos por la falta de bombillos y lámparas.
Las exigencias de estos pacientes, muchos residen en el occidente de Carabobo o en estados vecinos, son claras. Reclaman a Hidrocentro que agilice las reparaciones de las tuberías para que puedan limpiar los filtros de las máquinas ya que la falta de agua ponen en riesgo sus vidas.
Al Seguro Social le piden que honre las deudas que mantiene con la empresa que se encarga del mantenimiento de las máquinas para que puedan funcionar las 20 con las que cuentan, y que haga entrega del tratamiento que deben recibir.
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