Familiares de paciente fallecido golpean a médicos y enfermeras del hospital de Lídice

hospital de Lídice

El personal de salud de este centro asistencial realizó una asamblea este lunes. Los trabajadores decidieron suspender las consultas y las cirugías como forma de presión para que les brinden más seguridad

Redacción Crónica.Uno 

Caracas. El pasado 31 de julio un paciente con una obstrucción intestinal llegó al hospital Jesús Yerena de Lídice, y pese a los intentos de los médicos para salvarlo, la persona falleció. Acto seguido, los familiares alebrestados propinaron una golpiza al personal médico de guardia.

Tres doctores resultaron maltratados. Uno presentó una fractura en el tabique nasal, otro un traumatismo en la muñeca y un tercero una lesión en la cervical.

Además dos enfermeras del servicio también fueron agredidas, jamaqueadas y correteadas por la emergencia.

Esta situación generó que se realizara una asamblea de emergencia el lunes y este martes en la mañana los trabajadores protestaron en las puertas del puesto asistencial.

Reclamaron mayor seguridad y, mientras llegan los funcionarios, decidieron suspender las consultas y las cirugías electivas.

Santiago Sánchez, médico residente de traumatología, dijo que trabajan con zozobra y que no pueden estar en el hospital pensando en que van a salir lesionados.

“No nos negamos aprestar la atención a los pacientes. No nos negamos a pasar consultas ni a realizar cirugías. Pero exigimos que se nos respeten el derecho a la vida”.

Otra cosa que denunciaron los especialistas es que muy frecuente que las personas los agredan cuando les informan que nos hay insumos y medicinas.

La doctora Johana Arias, una de las especialistas golpeadas, dijo además que en el hospital no funciona la seguridad y que cualquiera pasa a las instalaciones sin la debida revisión.

Al parecer, luego de la reunión de este lunes la dirección del puesto asistencial se comprometió a colocar cuatro funcionarios policiales, pero en el momento de realizarse la protesta no habían llegado.

Foto Angeliana Escalona


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