Pese a que Jorge Rodríguez, ministro de Comunicación e Información, anunció un horario especial por 72 horas para las actividades escolares —de 7:00 a. m. a 12:00 m.—, las escuelas de Fe y Alegría atenderán a los estudiantes en ambos turnos del día. “Hemos asumido con responsabilidad mantener el derecho a clases”, dijo Noelbis Aguilar, directora nacional del programa Escuela de Fe y Alegría.

Caracas. Una nueva suspensión de clases sorprendió a las instituciones educativas del país. Esta vez fue una restricción en el horario de las actividades escolares que deja a los estudiantes del turno de la tarde sin clases.

Las 174 escuelas de Fe y Alegría más los 1073 planteles de la Asociación Venezolana de Escuelas Católicas (Avec) decidieron no acatar la suspensión y mantener también el horario habitual del turno de la tarde.

El ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, anunció el domingo a las 9:45 p. m. en un tuit que por 72 horas —lunes, martes y miércoles— los planteles prestarán servicio de 7:00 a. m. hasta las 12:00 m. Esta decisión forma parte del decreto N.° 3.818 que dictó Nicolás Maduro como parte del racionamiento eléctrico.

“Hemos asumido con responsabilidad mantener el derecho a clases”, aseguró Aguilar tras lo expresado por Rodríguez. La decisión se tomó luego de una consulta en que los directivos de Fe y Alegría expresaron que no hay riesgo en continuar con las actividades en ambos turnos.

“Vamos a trabajar hasta que las condiciones del contexto lo permitan”, agregó Aguilar. Las escuelas que no cuenten con el servicio de agua y luz tendrán flexibilización en el horario.

“Ya bastantes clases se han perdido. Mientras se haga uso racional de la energía podemos trabajar. Son pocos los equipos eléctricos con los que cuentan las escuelas, en algunos casos, no tenemos bombillos o se los han robado. Por lo que el gasto de energía no es tan alto”, enfatizó.

La presidenta de la Avec, Trina Carmona, manifestó a la viceministra de Educación, Rosangela Orozco, que la suspensión no es favorable para el trabajo de recuperación y planificación que se ha realizado tras casi 15 días sin clases entre marzo y parte de abril, esto como consecuencia de los cortes de luz que afectan al país desde el 7 de marzo.

“Decidimos que las escuelas organizaran sus actividades atendiendo a la realidad que tienen. La jornada tiene que abrirse y organizar el trabajo para atender a los estudiantes. Eso fue lo que acordarnos en función de las necesidades, de electricidad y agua, que puedan tener las escuelas”, explicó Carmona. Orozco quedó en evaluar la situación e informar a la directiva, refirió Carmona.

Yamile Martínez, directora en Distrito Capital del Programa Escuelas de Fe y Alegría, señaló que en esta orden del gobierno de Maduro no hubo orientaciones por parte del Ministerio de Educación, por lo que los supervisores circuitales no tienen instrucciones al respecto.

“La sugerencia que damos es trabajar hasta la tarde con horario flexible. Consideramos que no podemos seguir afectando la educación de los niños”, señaló Martínez.

“Los docentes que trabajan en el turno de la mañana así tengan clases en la tarde, trabajarán hasta las 12. Los profesores que como yo trabajamos en la tarde, estaremos hasta las dos de la tarde”, dijo una profesora del liceo Leopoldo Aguerrevere.

Otras escuelas privadas también mantendrán la jornada habitual hasta que no reciban información precisa del Ministerio de Educación.

La Red de Madres, Padres y Representantes hizo un llamado para que se exija que los colegios permanezcan abiertos y se atienda a los niños el mayor tiempo posible.

El pasado 3 de abril ministro de Educación, Aristóbulo Istúriz, informó sobre una reprogramación del calendario escolar. El cierre del año escolar 2018-2019 se realizará durante los días 25 y 26 de julio. “Tenemos del 3 al 11 de abril el cierre del segundo momento pedagógico que se vio afectado tanto en los fines del mes de marzo como en los primeros días de abril”, explicó.

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